Un documento del gobernante Partido Comunista (PCC), que se someterá a la consideración de la población de Cuba, defiende la vigencia del unipartidismo como base del sistema político.
El texto asegura que en la memoria de los habitantes de la isla el pluripartidismo se asocia a la politiquería, las injusticias, el abuso, las promesas demagógicas siempre incumplidas, el fraude y la corrupción.
El PCC está en condiciones "de perfeccionar su papel como guía de la sociedad cubana", enfatiza el documento citado por la agencia Prensa Latina y que se hará público el sábado.
"El Partido de la unidad, la democracia y los derechos humanos que defendemos" es el título del documento, según el cual sólo manteniendo el socialismo podrán preservarse en la isla los logros de los últimos 38 años.
Siguiendo la experiencia del amplio debate popular que generó el programa partidista en 1991, los comunistas cubanos recogerán sugerencias y opiniones sobre el informe, que deberá aprobarse en el quinto congreso, entre el 8 y el 10 de octubre.
Según la convocatoria, la máxima reunión del PCC reafirmará los principios ideológicos de la revolución de 1959 y la opción socialista.
"A veces tratan de imponernos democracias hechas en otros lugares, a imagen y semejanza de otras situaciones y contorno, y nosotros tenemos que explicar y razonar el porqué de nuestro sistema social", dijo el 30 de abril José Ramón Machado Ventura, miembro del Buró Político del PCC.
En PCC creció de 40.000 militantes entre 1962 y 1964 a más de 770.000 en la actualidad. Según el documento partidista del total de militantes más de 232.000 ingresaron en los años más recientes "a pesar del impacto ideológico negativo que representó el derrumbre del socialismo en Europa".
El Partido asegura que "después de tres décadas de gradual aumento del bienestar, igualdad y orden social sin parangón en el mundo en desarrollo", la llegada del denominado período especial cambió abruptamente la situación.
"Período especial en tiempos de paz" fue la designación que recibió oficialmente el programa de ajuste implantado por el gobierno para poder enfrentar la crisis económica que se inició en 1990 y que provocó un descenso del producto interno bruto de 34,8 por ciento en 1993.
Aunque la economía comenzó a emitir signos de reanimación en 1994 y en 1996 se registró un crecimiento de 7,8 por ciento, el gobierno reconoce que el despegue es aún insuficiente para mejorar las condiciones de vida de la población.
Agrega que actualmente predominan las carencias materiales, se produce "una indeseada diferenciación social", aumentan las ilegalidades y se dañan los valores que deben regir la sociedad.
El documento califica de "enorme" la lista de problemas que han puesto a prueba la voluntad de los cubanos.
Entre las limitaciones se mencionan las de alimentación, vestido, calzado, medios de higiene y medicamentos, electricidad, combustible doméstico, transporte, vivienda y servicios comunales.
Al mismo tiempo, como parte de una campaña oficial contra las ilegalidades y las indisciplinas sociales, el PCC llama a combatir la desidia, el despilfarro, las actitudes burocráticas, la tolerancia con el robo de materias primas y artículos.
Trascendió que parte considerable del material está dedicado a analizar la evolución del enfrentamiento entre Estados Unidos y Cuba. (FIN/IPS/da/dg/ip/97
