Líderes del Caribe y el presidente estadounidense Bill Clinton discutirán este viernes y sábado en Barbados estrategias para reducir la demanda de la droga y las nuevas leyes de inmigración de Estados Unidos, entre otros asuntos relacionados con el comercio y el ambiente.
En un documento sometido a la consideración de los organizadores del encuentro, funcionarios estadounidenses plantearon su propio programa de reducción de la demanda de drogas, que tiene como principal objeto a los niños escolares, "particularmente vulnerables a las drogas adictivas".
Estados Unidos proyecta lanzar una campaña de reducción de la demanda de narcóticos dirigida a sus propios jóvenes, a un costo de 5.500 millones de dólares.
El primer ministro de Trinidad y Tobago, Basdeo Panday, planteará el tema de las nuevas leyes de inmigración estadounidenses cuando los líderes de la Comunidad del Caribe (Caricom) se reúnan en Barbados este jueves, antes de su cumbre con Clinton. Según un funcionario, las nuevas leyes podrían producir "deportaciones masivas".
Aunque Washington ya indicó su intención de proveer información por adelantado sobre deportaciones de inmigrantes ilegales y delincuentes convictos, no hubo consenso sobre un enfoque de las nuevas leyes de inmigración, que afectan a miles de caribeños residentes en Estados Unidos.
El gobierno de Estados Unidos presiona para obtener una acción firme de los gobiernos del Caribe para evitar el uso de la región como punto de tránsito de inmigrantes ilegales de terceros países, entre ellos China y algunos estados de Africa.
En el ámbito comercial, Caricom procura una extensión de la Iniciativa de la Cuenca del Caribe como alternativa a la integración de algunos países caribeños al Tratado de Libre Comercio de América del Norte.
Se estima que los líderes del Caribe presionarán para lograr un acceso libre de aranceles para una amplia variedad de productos caribeños, y que Estados Unidos estaría dispuesto a aceptarlo.
En este sentido, una reunión de seguimiento del Consejo de Comercio e Inversión de Caricom-Estados Unidos tendrá lugar este año para analizar el asunto con más detalle, pero también para procurar ayuda técnica específica con el fin de facilitar el cumplimiento de los compromisos asumidos por la región en la Ronda Uruguay.
La cumbre también incluirá discusiones sobre el estado del ambiente, especialmente sobre la creación de una base computarizada de datos ambientales de la región.
Así mismo, en el Año Internacional de los Arrecifes determinado por la ONU, Estados Unidos y el Caribe buscarán formas de proteger los arrecifes de coral de la región y su biodiversidad.
"Los arrecifes constituyen una atracción turística importante y zonas de reproducción de peces", destaca el documento de la cumbre.
Se prevé que el encuentro producirá un programa de trabajo para la implementación del Marco de Acción de la Iniciativa Internacional sobre Arrecifes de Coral y del Plan de Acción Regional de la Región Tropical de América.
La contaminación marina también llamó la atención de los organizadores de la cumbre, quienes proponen iniciar esfuerzos entre exportadores e importadores "para reducir la proliferación de desechos sólidos e involucrar a todos los gobiernos en proyectos de reciclaje".
Tras una visita a México, Clinton llegará el viernes a Bridgetown, la capital de Barbados, donde se realizan intensos preparativos. (FIN/IPS/tra-en/wg/cb/ml/if-ip/97
