Treinta mil niños y adolescentes mexicanos indocumentados fueron expulsados en 1996 de Estados Unidos y la cantidad puede aumentar este año, a causa de la entrada en vigor de nuevas leyes migratorias promulgadas por Washington.
Los menores son deportados en condiciones inadecuadas y en muchos casos vuelven a México con problemas de desnutrición y de adicción a alguna droga, advirtió Mario Fuentes, director del Sistema Nacional de Desarrollo Integral de la Familia (DIF).
Algunos habían sido utilizados por narcotraficantes para pasar drogas de México a Estados Unidos, dijo Fuentes.
El director del DIF admitió que es necesaria una mayor coordinación entre su oficina y autoridades de migración de México, para atender a los niños que viajan a Estados Unidos sin documentación apropiada.
Agregó que la promulgación de legislación adicional en materia de migración podría incrementar los casos de expulsión de Estados Unidos de menores en situación irregular.
Las normas, que según las autoridades estadounidenses no contemplan expulsiones masivas, establecen mayores controles migratorios, endurece los castigos contra los indocumentados y facilitan las deportaciones.
Cincuenta por ciento de los menores mexicanos repatriados tienen entre 12 y 15 años de edad, 46 por ciento entre 16 y 17 años y cuatro por ciento son menores de 11 años, según una investigación del DIF,
La mayoría sufren maltrato en México o en Estados Unidos, apunta el DIF. En 1996 se informaron 20.000 casos de maltrato infantil en México.
Cada año son deportados de Estados Unidos alrededor de 1,5 millones de indocumentados mexicanos. (FIN/IPS/dc/ff/pr hd/97