Estados Unidos tendría que cancelar préstamos por 14.000 millones de dólares a países que utilizaron los créditos para comprar aviones, helicópteros y barcos de combate, misiles, tanques y vehículos blindados.
"El grueso de la deuda tendría que ser ahora cancelada", dijo Tom Cardamone, editor de Arms Trade News, publicación mensual del Consejo por un Mundo Habitable (CLW), con sede en Washington.
Los mayores compradores de armas estadounidenses que deben dinero a Washington incluyen a Israel (6.000 millones de dólares), Turquía (3.200 millones), y Grecia (2.900 millones). Pero cuatro países africanos deben en conjunto cerca de medio millón de dólares.
En América Latina y el Caribe, los mayores deudores son El Salvador (43,1 millones de dólares), Honduras (27,8 millones de dólares), Perú (21,2 millones), Colombia (18,6 millones) y Ecuador (17,2 millones de dólares).
Datos divulgados por el Pentágono revelan que Liberia, Somalía, Sudán y Zaire deben 434 millones de dólares en armas y préstamos, de los cuales más de la mitad, 231 millones, corresponden a pagos atrasados.
Estos son países "destrozados por la guerra", y las posibilidades de que paguen sus préstamos a Estados Unidos son lejanas, dijo Cardamone.
Según datos del Pentágono, los préstamos de estos cuatro se remontan a comienzos de 1980, cuando sucesivos gobiernos de Estados Unidos los utilizaron para enfrentar la influencia política y militar de la Unión Soviética en Africa.
Señalando que tanto Estados Unidos como la Unión Soviética utilizaron a Africa como "campo de batalla ideológico", Dan Volman, del Proyecto Africa de Investigación afirma que los préstamos de Estados Unidos llegaron a "algunos de los más corruptos" países del continente.
Hay "una relación directa" entre la financiación militar de Estados Unidos y países "ahora dominados por el caos", dijo Volman en un reciente volumen de Arms Trade News.
Volman asevera que Washington finalmente se vería forzado a anular las deudas africanas convirtiéndolas en donaciones, lo cual "ha sido hecho con anterioridad".
Tras el fin de la guerra fría, hay una posición predominante en Estados Unidos según la cual el continente africano es de escaso o nulo valor. "En Africa subsahariana, la financiación militar extranjera ha sido casi totalmente eliminada", dijo el experto.
Según analistas militares, no se espera que Africa haga compras significativas de armas a fines de esta década o a fin de siglo. Las únicas excepciones serían países como Sudáfrica y Nigeria, y países del norte del continente como Túnez, Marruecos y Libia.
A pesar de varios conflictos militares en curso, algunos países africanos se han visto forzados a reducir los gastos de defensa por motivos políticos y económicos.
El Fondo Monetario Internacional (FMI) identificó al menos tres países africanos, Etiopía, Mozambique y Namibia, que voluntariamente redujeron sus presupuestos militares.
Israel no ha hecho pagos "desde hace un tiempo", destaca Cardamone, y añade que los créditos a ese país entre 1976 y 1984 fueron varias veces refinanciados desde 1988.
Estados Unidos, que ha entregado a Israel una asombrosa cifra anual de 1.800 millones de dólares en donaciones militares desde los acuerdos de paz de Camp David, de 1979, también le brindó créditos para la compra de armas.
Además, desde los acuerdos, Washington entregó 1.300 millones de dólares de donaciones militares a Egipto.
Otros deudores del Sur incluyen a Pakistán (292,5 millones de dólares), Corea del Sur (150,7 millones), Jordania (163,8 millones), Filipinas (84.4 millones), Marruecos (82,7 millones), y Tailandia (64 millones de dólares). (FIN/IPS/tra-en/td/yjc/lp/ip/97