La cumbre presidencial hemisférica de 1998 y las negociaciones para la construcción del Area de Libre Comercio de América parecen amenazadas, al concluir hoy en medio de un clima de disenso la tercera reunión de viceministros de Comercio del área.
Los representantes de 25 países -de los 34 que participan en el proceso- no lograron en cuatro días de discusiones un consenso sobre los puntos cruciales de una declaración que será llevada a los ministros de Comercio que se reunirán el 15 y 16 de mayo en Belo Ho rizonte, capital del estado brasileño de Minas Gerais.
De los 17 puntos del borrador, no hubo acuerdo prácticamente sobre la mitad, los más importantes, informó Arthur Denot Medeiros, embajador brasileño ante la Asociación Latinoamericana de Integración.
"Hay diferencias de fondo que quedaron más evidentes en la redacción del texto", especialmente entre el Mercosur por un lado, y Canadá y Estados Unidos, por otro, indicó el diplomático, experiente negociador de acuerdos comerciales.
Los norteamericanos, por ejemplo, pretendían un compromiso de todos por el lanzamiento de las negociaciones en la reunión de marzo en Santiago de Chile, aunque haya cuestiones pendientes sobre definiciones previas ,como objetivos, temas y etapas del proceso.
Estas se discutirían "sobre la marcha", una posición que el Mercosur rechaza firmemente, aceptando únicamente las negociaciones de contenido tras un acuerdo sobre esas cuestiones previas.
En el compromiso firmado por los presidentes en Miami, en 1994, no figura el inicio de las negociaciones del libre comercio en 1998 sino solamente el hecho que las nuevas reglas deben ser definidas antes del 2005, recordó el representante brasileño.
El Mercosur, con "total cohesión", prefiere postergar el inicio del proceso negociador para cuando estén dirimidas las discrepancias, indicó.
El bloque sureño defiende, por ejemplo, que las negociaciones se hagan en tres etapas, quedando la desgravación arancelaria para los dos últimos años previos al 2005.
La discusión debe comenzar por la eliminación de barreras no arancelarias, burocráticas, sanitarias, cuotas y otras restricciones, propone.
Estados Unidos y Canadá pretenden a su vez negociaciones simultáneas de todos los temas. Anteriormente Washington defendía dos etapas, comenzando por la cuestión arancelaria, al revés del orden propuesto por el Mercosur.
De todas formas, el hecho de que en Río no se hayaa adoptado un borrador no compromete la reunión ministerial de Belo Horizonte.
Las discrepancias pueden pasar a esa instancia más elevada y no se descarta una reunión extraordinaria anterior de los viceministros, dijo Denot Medeiros.
La delegación chilena presentó un documento -"La visión de Chile" – proponiendo flexibilizaciones, como el derecho de cada país elegir cuándo adherirá a los acuerdos, buscando acercar las posiciones del Mercosur y Estados Unidos-Canadá, sin éxito hasta ahora.
De todas formas, antes de la cumbre de marzo habrá aún tres reuniones de viceministros, además de dos a nivel ministerial, la de Belo Horizonte y otra en Costa Rica en febrero. Allí las posiciones se podrán acercar. (FIN/IPS/mo/dg/if/97