ZAIRE: Decenas de miles de refugiados huyen de los combates

Columnas de decenas de millares de refugiados ruandeses se dirigen hacia la ciudad de Kisangani, al este de Zaire, después de abandonar el campamento de Tingi Tingi, anunció hoy el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los refugiados (ACNUR).

El campamento de Tingi Tingi, que llegó a alojar 170.000 refugiados, se encontraba este martes desierto, dijo el vocero de ACNUR en Ginebra, Chris Janowski.

El éxodo de los refugiados se relaciona con el deterioro, desde octubre pasado, de la situación militar en la región oriental de Zaire, controlada por fuerzas rebeldes al gobierno de Kinshasha.

El frente de combates entre rebeldes y regulares se desplazó en forma paulatina durante las últimas semanas hasta llegar a los campamentos de Tingi Tingi.

El aumento de la tensión en la región impulsó la fuga de los refugiados, que optaron por dirigirse hacia la ciudad de Kinsangani, ubicada unos 230 kilometros al noroeste de Tingi Tingi.

El vocero de ACNUR dijo que la columna de los refugiados se extiende a lo largo de 50 kilómetros. La cabeza de la marcha se encontraba a unos 100 kilómetros de Kisangani, refirió ACNUR basado en informes de organizaciones no gubernamentales y observaciones aéreas.

Los informes recibidos por ACNUR sostuvieron que la zona de Tingi Tingi sigue siendo escenario de combates.

Las autoridades locales zaireñas trataron de desviar la columna de refugiados en dirección hacia la ciudad de Ubundu, a unos 100 kilómetros al sur de Kisangani.

Sin embargo, los informes recibidos por ACNUR indicaron que los refugiados prefieren proseguir la marcha rumbo a Kisangani.

Las agencias de la Organización de las Naciones Unidas se preparaban en Ubundu para recibir el flujo de refugiados.

La línea ferroviaria que une Kisangani con Ubundu puede ser utilizada para el transporte de ayuda, dijo Janowski. Otra vía de aprovisionamiento es la fluvial, por las aguas del Zaire, agregó.

Los funcionarios de ACNUR trataban este martes de conseguir seguridades para poder continuar con los programas de ayuda humanitaria en la región oriental de Zaire.

La mayoría de las organizaciones de asistencia retiraron el sábado último su personal de Kisangani, pero ACNUR anunció que se disponen a regresar a la brevedad.

La organización Médecins sans Frontièrs confirmó que el retiro temporario de Kisangani obedeció al aumento de la tensión en esa ciudad y en toda la región de Kindu, y a la imposibilidad de otorgar "seguridad a los refugiados ruandeses y burundianos del campamento de Tingi Tingi".

La vocera del Programa Mundial de Alimentos (PMA), Christiane Berthiaume, anunció el arribo de un avión con seis toneladas de alimentos a Punia, al sur de Tingi Tingi, donde se encuentran 4.000 refugiados.

La fuente dijo que unos 10.000 refugiados procedentes de Tingi Tingi se dirigen hacia Punia.

Fuentes de ACNUR indicaron que el número de refugiados en Zaire se elevaba, en febrero pasado, a 774.500. La mayoría, 370.000, eran ruandeses. El resto, 76.000 burundianos, 200.000 angoleños, 110.000 sudaneses y 18.500 ugandeses.

La crisis de refugiados estalló en la región africana de los Grandes Lagos en 1994, cuando la guerra civil de Ruanda se transformó en un genocidio que cobró la vida de 500.000 personas, en su mayoría de la etnia tutsi.

Unos dos millones de ruandeses se dispersaron entonces por la región de los Grandes Lagos hasta que en 1996 comenzó el retorno a Ruanda. Más de 1,3 millones de ruandeses retornaron el año pasado de sus refugios en Zaire y Tanzania. (FIN/IPS/pc/ag/pr/97

Archivado en:

Compartir

Facebook
Twitter
LinkedIn

Este informe incluye imágenes de calidad que pueden ser bajadas e impresas. Copyright IPS, estas imágenes sólo pueden ser impresas junto con este informe