Los conflictos que periódicamente se registran en el comercio entre los países de América Central y devienen en pequeñas crisis no han sido, sin embargo, un obstáculo para el crecimiento del intercambio regional.
Según el último informe de la Secretaría de Integración Económica Centroamericana (Sieca), el intercambio comercial regional pasó de 782 millones de dólares en 1991 a 1.592 millones en 1996.
En total, los países de la región exportaron por 7.400 millones de dólares.
Las naciones que más se favorecieron desde principios de la década con el crecimiento del comercio regional han sido El Salvador y Costa Rica, cuyas exportaciones a sus vecinos más que duplicaron.
El Salvador, que en 1991 vendió en el área por 197,3 millones de dólares, en 1996 llegó a 461,7 millones, mientras Costa Rica imcrementó sus exportaciones regionales de 177,7 a 390,4 millones de dólares.
El país con menos ventas al resto del istmo es Honduras, con un estimado de 60,7 millones de dólares para 1996.
Pero en exportaciones totales (a América Central y el resto del mundo) el más rezagado sigue siendo Nicaragua, con 565,9 millones de dólares.
Laura Rodríguez, directora de Integración Económica de Costa Rica, considera que tras 37 años de existencia el Mercado Común Centroamericano no es frágil ni se detendrá por pequeños conflictos, como las barreras arancelarias impuestas por El Salvador a los quesos de Panamá o a la carne de Nicaragua.
"En estos 37 años se han estancado procesos políticos pero no los comerciales. La década de los 70 fue un periodo deprimido porque varios países estaban en guerras internas, se deterioró la relación comercial pero no se detuvo", indicó.
Para Costa Rica, América Central es, según la directora de Integración, el tercer mercado en importancia, después de Estados Unidos y la Unión Europea. Al resto del istmo va 97 por ciento de las exportaciones industriales de Costa Rica.
El rubro que más conflictos ocasiona en el comercio regional es el de productos agrícolas y agropecuarios, porque usualmente hay presiones para defender el mercado y evitar perjudicar a productores nacionales, explicó la experta.
En uno de esos episodios, ya superado, Costa Rica cerró las fronteras a la importación de cebolla nicaragüense, alegando incumplimiento de normas sanitarias, para proteger a los productores locales.
A principios de febrero, El Salvador puso restricciones al ingreso de quesos panameños alegando incumplimiento en las normas de origen. El problema aún no se ha resuelto, pero está pendiente una conversación.
También hubo conflicto entre Nicaragua y El Salvador. Este último puso barreras arancelarias a carne nicaragüense y, a su vez, Managua decidió cobrar impuestos a productos salvadoreños como pollo y huevos.
Para Eduardo Ayala, director de Política Comercial de El Salvador, el problema es que los tratados comerciales de la región datan de los años 60 (70 en el caso de Panamá), y han sido superados por las nuevas reglas de comercio internacional.
"Las normas que tenemos no son suficientes, por lo tanto hay que mejorar la reglamentación para regular el intercambio", afirmó.
Según Laura Rodríguez, los pequeños conflictos comerciales fortalecen el sistema de integración, obligan a tomar medidas para solucionar los problemas y enseñan a los países a ser disciplinados en la solución de las controversias.
Un ejemplo de ello pueden ser los 13 acuerdos a que llegaron El Salvador y Nicaragua tras una reunión celebrada el 19 de febrero por los respectivos ministros de Agricultura y Economía.
No utilizar las fronteras para impedir el comercio entre ambos paises, buscar un arancel externo común para el comercio de granos básicos y evitar distorsiones y triangulaciones del mercado son algunos de los acuerdos logrados.
Paralelamente, ambos gobiernos se comprometieron a no recurrir a permisos fitozoosanitarios como medida para impedir el libre comercio.
Ayala y Rodríguez no se asustan frente a los problemas del comercio regional, propios también de acuerdos como el Mercado Común del Sur, y están convencidos de que cada día serán más fácilmente superables porque se irán creando los instrumentos para lograrlo. (FIN/IPS/mso/dg/if/97)