La Academia Mexicana de Derechos Humanos (AMDH) se declaró a favor de solicitar a la Corte Internacional de Justicia el reconocimiento de la guerrilla zapatista como "parte beligerante" y un dictamen sobre el valor jurídico de los acuerdos firmados en Chiapas.
"Es tiempo de actuar, ya no se puede jugar con la palabra empeñada, ni con la paz armada", dijo el presidente de la AMDH, Oscar González.
González advirtió el peligro que representa el creciente distanciamiento entre el gobierno de Ernesto Zedillo y el Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN).
La Corte Internacional de Justicia, radicada en La Haya, podría superar el estancamiento en el que se encuentran el diálogo en el sureño estado de Chiapas, agregó.
El EZLN acusó el jueves a los mediadores del Congreso de alejar las posibilidades de negociación al retirar un proyecto de ley sobre derechos indígenas. El gobierno rechazó el contenido del proyecto, argumentando que divide al país en pequeños estados.
La guerrilla, organizaciones de nativos y los diputados que redactaron la iniciativa afirman que ésta recoge fielmente el acuerdo sobre derechos y cultura indígena firmado en Chiapas por el gobierno y los dirigentes del EZLN en febrero de 1996.
González sostiene que con la intervención de la Corte Internacional de La Haya y el reconocimiento del EZLN como fuerza beligerante podrían definirse "los alcances de un largo y penoso esfuerzo de negociación que no puede ni debe ser tirado por la borda de manera unilateral, para llamar después a continuar el diálogo".
Los mediadores del Congreso y portavoces oficiales piden retomar en forma inmediata la negociación directa en Chiapas, suspendida desde septiembre de 1996. Pero el EZLN replica que no puede regresar a la mesa de diálogo si el gobierno no cumple el acuerdo sobre derechos indígenas.
La actitud oficial frente al único pacto suscrito demostraría que "nunca hubo intención del Ejecutivo de cumplir los acuerdos y resolver el conflicto por la vía pacífica", cree la guerrilla.
Para la AMDH, nada impide a la partes en conflicto promover un pronunciamiento de la Corte Internacional de Justicia sobre el significado y valor jurídico de los acuerdos suscritos.
Si el diálogo sigue estancado, la violencia y la impunidad aumentarán en Chiapas, advirtió el presidente de la AMDH.
Mientras, se incrementa la presencia militar en la zona de influencia del EZLN, y los hechos de violencia se multiplican en municipios y comunidades indígenas de Chiapas por problemas de tierras, disputas políticas o diferencias religiosas.
Doce personas murieron en las últimas dos semanas en efrentamientos registrados en Chiapas, uno de los estados más pobres de México. (FIN/IPS/dc/ff/ip/97