Oriente se casará con Occidente en los hospitales de Malasia. El gobierno abrirá las puertas de los hospitales estatales a las formas de medicina tradicional que se practican en este país del sudeste de Asia.
El gobierno anunció sus planes de reformar este año la Ley de Medicina de 1971 con el fin de que se admita la validez de las técnicas tradicionales, lo que supone un reconocimiento del papel que han desempeñado durante siglos en el cuidado de la salud en esta sociedad.
El ministro de Salud, Chua Jui Meng, dijo que el gobierno pretende tomar lo mejor de la medicina tradicional que practican expertos de origen malayo, chino e indio, los principales grupos étnicos del país.
"Deberíamos apreciar nuestra rica herencia", dijo Chua, para quien las leyes vigentes, que datan de épocas coloniales, se basan en "ideas obsoletas" no aplicables en tiempos en que la gente se muestra más abierta a las terapias alternativas.
Pero muchos los médicos convencionales malayos se manifestaron preocupados. Algunas asociaciones manifestaron con cautela su beneplácito ante el anuncio y muchos profesionales lo rechazaron.
Hamid Abdul Karim, presidente de la Asociación Médica Malaya, dijo que el trabajo conjunto entre profesionales basados en la ciencia occidental y los curadores tradicionales no es algo "práctico" ni "aceptable".
Algunos médicos propusieron que se establezcan hospitales separados para los sanadores tradicionales, de modo de facilitar la supervisión del estado.
"Habrá muchos conflictos si los dos sistemas se practican bajo el mismo techo. No creo que funcione. Además, todo el sistema hospitalario será corporativizado o privatizado, y no habrá lugar para la medicina tradicional en ellos", dijo B. Gunasekaran, un experto en administración sanitaria.
De todos modos, el gabinete de gobierno de Malasia aprobará a mediados de año las reformas a la Ley Médica para elevarlas al parlamento. Luego de la aprobación definitiva, las autoridades registrarán a los curadores tradicionales antes de admitirlos en hospitales estatales.
Chua aseguró que el Ministerio de Salud solo admitirá a curadores calificados. "Ellos mismos deberán establecer un sistema de acreditación, control de calidad y entrenamiento adecuado", explicó.
Pero Abdul Karim dijo que se requiere la aprobación de una ley separada sobre medicina tradicional, pues no es apropiado enmendar la ley vigente solo "para incluir y legalizar" la actividad de los curadores.
Además de aceptar las prácticas tradicionales, el gobierno debería registrar todas las hierbas y métodos terapéuticos, explicó el profesional.
La eficacia de la medicina tradicional ha sido probada a través de evidencias científicas y la posibilidad de pronosticar los resultados de los tratamientos, lo que convierte estas prácticas en aceptables, según Abdul Karim.
La medicina tradicional siempre tuvo espacio en la multiétnica Malasia. Algunas de las disciplinas aplicadas en el país son los tratamientos con hierbas, la reflexología, la macrobiótica, la homeopatía, la acupuntura y las prácticas holísticas y ayurvédica.
Los curadores tradicionales creen que la contribución que prestarán a la medicina es mayor a la que pueda creerse.
"La medicina moderna no cree que la prevención sea importante. Prefiere tratar los síntomas y no las causas", dijo Daphne Goh, quien enseña técnicas de prevención y brinda tratamiento reflexológico a quienes sufren insomnio, indigestión y dolores de espalda.
La medicina occidental convencional interviene en las crisis: combate enfermedades, propone intervenciones quirúrgicas o prescribe drogas para destruir invasores biológicos, según Goh. La experta considera que estos tratamientos son importantes en caso de enfermedades serias o lesiones.
Pero la medicina tradicional que se practica en Malasia presta atención a las personas sanas para que eviten las enfermedades. Por eso, sostuvo, se concentra más en el autocuidado y en el análisis del cuerpo.
La dieta apropiada, el estilo de vida y el ejercicio son esenciales para el bienestar y la salud, de acuerdo con estas disciplinas.
"Un médico moderno puede decir que un resfrío se debe a un virus. Pero un médico tradicional chino podría determinar que el sistema inmunológico no está bien y prescribir, por lo tanto, una dieta o ejercicios para fortalecerlo", explicó Goh.
La medicina oriental maneja conceptos como los de alimentos "calientes" o "fríos", que son aplicados para equilibrar las funciones orgánicas del cuerpo humano. Una persona resfriada, entonces, debería tomar refrescos hidratantes o té chino "para enfriar el sistema e impedir la fiebre", agregó.
"Creo en el matrimonio entre lo mejor de los dos mundos. Si una persona se queja de dolores y un análisis médico occidental no revela nada, quizá deba acudir a la reflexología o al masaje tradicional", concluyó Goh. (FIN/IPS/tra-en/ann/js/mj/he/97