Un clima de euforia se creó en España al conocerse hoy una nueva caída de la inflación, que registró tasa negativa en febrero, mientras se mantiene el crecimiento del producto interno bruto (PIB).
Los precios al consumo (IPC) bajaron en febrero 0,1 por ciento, situando la inflación de los últimos 12 meses en 2,5 por ciento, informó el oficial Instituto Nacional de Estadísticas (INE)
Se trata de la tasa interanual más baja del último medio siglo y dos décimas por debajo del objetivo fijado por el Gobierno para finales de año, .
El secretario de Estado de Hacienda, Cristóbal Montoro, subrayó que la caída se registra al mismo tiempo que se mantiene el crecimiento económico, estimado por el gobierno en tres por ciento anual del PIB.
Según el presidente de la comunidad autónoma de Cataluña, Jordi Pujol, el descenso del IPC confirma que "la política económica que se está realizando es la adecuada".
De mantenerse esta tendencia decreciente del IPC, España cumpliría con los criterios de baja inflación acordados por los 15 estados miembros de la Unión Europea para establecer una moneda común.
En 1998 formarán parte de la Unidad Monetaria europea los países que cumplan con los criterios de convergencia, siendo el de la contención de la inflación uno de los más importantes.
Este buen comportamiento de los precios en febrero es más destacable si se tiene en cuenta que en ese mes, España soportó una dura huelga de camioneros, que se tradujo en reducción de la actividad económica y presión inflacionaria.
Una de las causas que los especialistas destacan para explicar la marcha de la economía es la baja de los intereses de los créditos al consumo, de cuatro puntos en un año. La tasa se ubica en la actualidad por debajo de 10 por ciento anual.
El diario especializado en economía Expansión adjudica el mérito al Banco de España (central, autoridad monetaria). El consumo aumentó 1,9 por ciento en 1996, favorecido por la rebaja de intereses, este año crecería entre 2,5 y 2,7 por ciento, de acuerdo con las proyecciones.
El Banco de España podría volver a reducir este viernes el precio oficial del dinero, según fuentes del sector financiero. Pujol, cuyo partido apoya al gobierno central en el parlamento nacional, comentó que técnicamente es posible otro descenso de las tasas de interés.
El sector privado se suma al optimismo oficial. Así lo confirma una encuesta entre los 247 empresarios más grandes de España, realizada por la consultora Coopers & Lybrand para el matutino El País.
Los encuestados creen que la situación de la economía española en general y la de las compañías que dirigen en particular es relativamente buena, ha mejorado en los últimos meses y continuará haciéndolo en 1997.
Los empresarios apoyan la gestión gubernamental en materia de inflación y tipo de cambio y el esfuerzo de convergencia con la Unión Europea, pero critican las cotizaciones sociales y el régimen de pensiones, y la reducción de inversiones en infraestructura, de acuerdo con la encuesta.
Los sindicatos y la central de empresarios se aprestan a concluir un acuerdo para flexibilizar el mercado del trabajo. Esto significaría abaratar la indemnización por despido en los nuevos contratos de empleo temporal.
Pero, al mismo tiempo, los sindicatos exigen mantener la estabilidad en el empleo y los montos indemnizatorios de los contratos existentes, y un aumento de salarios por encima del índice de inflación. (FIN/IPS/af/ff/if/97
