El gobierno de Colombia decidió este viernes reanudar la destrucción de cultivos ilícitos, suspendida el miércoles en respuesta a la "descertificación" de que fue objeto por parte de Estados Unidos.
La decisión fue tomada en una reunión del Consejo Nacional de Estupefacientes, del que forman parte la policía y los ministerios de Justicia, Defensa, Salud y Medio Ambiente.
Durante la reunión se acordó reanudar el miércoles el programa de destrucción de los cultivos de coca, amapola y marihuana con el herbicida glifosato, cuya efectividad ha sido cuestionada por Washington, y estudiar una lista de componentes granulados para su reemplazo.
El glifosato también ha sido cuestionado por grupos ambientalistas debido a los daños que ocasiona a la fauna, la flora y la vida humana.
El Consejo decidió también extender el programa de erradicación hacia zonas en las que no se estaba realizando, solicitar una veduría internacional de verificación de las cifras sobre la destrucción de los cultivos ilícitos y destinar recursos para compra de equipos.
El gobierno suspendió el programa de erradicación de cultivos por vía aérea para su evaluación, tras las críticas de que fue objeto por Estados Unidos cuando se le aplicó la descertificación por su falta de colaboración en la lucha contra el narcotráfico.
La suspensión fue interpretada en algunos medios como una respuesta a la descertificación estadounidense, pero el presidente Ernesto Samper la atribuyó a razones de orden "técnico y científico".
Según el documento en que el Departamento de Estado recomendó la descertificación a Colombia, "la oposición del gobierno a ensayar un herbicida granular", ante la ineficiencia de los que se han empleado, es especialmente problemática para el significativo aumento de los cultivos ilícitos.
Para Estados Unidos, los cultivos de coca ocupan un área cercana a las 67.000 hectáreas, mientras que Bogotá sostiene que se trata de 50.900 hectáreras.
El 28 de febrero, al anunciar la "descertificación" para Colombia, Estados Unidos dio un plazo de seis meses al país "para que presente mejores resultados en su lucha antidrogas".
Entre las acciones planteadas por Washington incluyen la aprobación de la extradición para los narcotraficantes y la aplicación de las leyes de aumento de penas y de extinción de dominio de sus bienes.(FIN/IPS/yf/ag/ip/97
