Desde el comienzo del programa "Abrace a un niño" del gobierno del Distrito Federal en diciembre pasado, 163 familias se decidieron a "apadrinar" a menores que viven en las calles de Brasilia.
El programa, desarrollado por la Secretaría de la Infancia del gobierno local, integra la campaña "En vez de limosna, dé ciudadanía".
Las familias "adoptantes" de la calle a través de la Secretaría prestan atención o ayuda financiera, como alimento, ropa, material escolar o de construcción a las familias de los niños que acogen.
La primera persona que "adoptó" a un menor carenciado fue la empresaria Carla Brandao, que una vez por mes lleva una cesta básica de alimentos a J.A.P, de 11 años, de la localidad de Santa María.
Pronto le siguió un profesor de la Universidad de Brasilia, que divulgó la idea entre sus colegas, muchos de los cuales le imitaron.
La emisora de televisión NET "adoptó", por su parte, a 12 niños.
Otros pilares de la campaña "En vez de limosna, dé ciudadanía" son las donaciones y depósitos de dinero en el Fondo de los Derechos del Niño y el Adolescente, que se destinan a financiar programas oficiales y no gubernamentales.
Los depósitos reciben un descuento de hasta 12 por ciento en el impuesto de la renta de personas físicas y de uno por ciento en el caso de las personas jurídicas. (FIN/IPS/mj/dv pr/97
