La película "When We Were Kings" (Cuando éramos reyes), nominada para el Oscar, no sería lo que es si el boxeador de peso pesado George Foreman no se hubiera resbalado, antes de la legendaria pelea en que perdió el título mundial contra Mohammad Alí en 1974 en Zaire.
El resultado de su traspié hace más de 20 años condujo a este intenso retrato cinematográfico de Mohammad Alí, cuya terminación le llevó 22 años al director Leon Gast.
El promotor Don King convenció a Alí y Foreman para que pelearan y al dictador de Zaire, Mobutu Sese Seko, para que aportara los 10 millones de dólares en premios que se repartirían a los boxeadores por partes iguales. Mobutu fue persuadido por la publicidad para sí mismo y su país.
En principio, la pelea iba a ser la culminación de tres días de música con intérpretes africanos y estadounidenses, incluyendo a James Brown, B.B. King, The Spinners y Miriam Makeba. Gast fue contratado para documentar el espectáculo, concentrándose en la música, con el fin de obtener una especie de Woodstock negro.
El desastre ocurrió cinco días antes de la pelea, cuando Foreman se resbaló mientras entrenaba y recibió un codazo sobre su ojo derecho. La herida que se produjo obligó a los promotores a aplazar la pelea.
Con tal de no perder su dinero o salir desprestigiado, Mobutu informó a los boxeadores que no se les permitiría abandonar el país hasta que la pelea tuviera lugar.
Como los músicos tenían obligaciones contractuales que cumplir en otros lugares, el festival de música se realizó sin la pelea. Gast y su equipo permanecieron en Zaire porque la pelea era parte inseparable del acontecimiento.
Durante seis semanas, los realizadores siguieron a Alí en sus andanzas por el país y filmaron la alegre recepción que se le brindaba prácticamente en todos lados.
Alí estaba en óptimo estado, entrenando frente a las cámaras, jactándose de su velocidad, y jugando con los niños que lo rodeaban. "Noquée una piedra", declaró. "Pulvericé un ladrillo. Soy tan malo que enfermo a la medicina".
Por el contrario, Foreman se sentía incómodo en Africa y permaneció la mayor parte del tiempo en su gimnasio. Salió poco y evitó las cámaras que tanto gustaban a Alí.
La imagen de Mohammad Alí como uno de los mejores boxeadores de la historia está tan arraigada que es difícil imaginarlo como antagonista. Pero "When We Were Kings" nos recuerda que Foreman también fue un gran boxeador.
Más grande, más fuerte y más joven que Alí, Foreman había vapuleado a Joe Frazier para ganar la corona de pesos pesados. Alí tenía 32 años entonces, viejo para ser boxeador, y aunque tenía el espíritu fanfarrón de siempre, nadie pensaba que pudiera vencer al campeón.
Alí había dicho que bailaría en torno a Foreman, pero cuando los dos se enfrentaron, Foreman resultó un experto para contenerlo. Obligado a cambiar de táctica, Alí se apoyó contra las cuerdas y permitió que Foreman lo golpeara hasta que quedó agotado en el octavo round.
Intuyendo el cambio en la situación, Alí se separó de las cuerdas y atacó. Entre el público, se puede ver el asombro de los escritores Norman Mailer y George Plimpton cuando Foreman cae contra la lona y queda fuera de combate.
El retraso de la pelea fue el comienzo de los problemas para Gast. La película estaba financiada por una empresa británica propiedad de un funcionario del gobierno de Liberia. Cuando la guerra civil se desató poco después en ese país, la financiación se esfumó y Gast tuvo que abandonar el proyecto.
Durante los 20 años que siguieron, Gast vivió con los miles de metros de película que filmó. No fue hasta fines de los ochenta que retomó el proyecto.
Los obstáculos eran muchos. Los gustos musicales habían cambiado tanto con el advenimiento del rap que los distribuidores no querían arriesgarse con un documental musical filmado hacía casi dos décadas.
La película tendría que concentrarse sobre la pelea. Pero había pasado tanto tiempo que el público ya no la recordaba. Como los derechos de la película habían sido concedidos para su emisión por circuito cerrado en Estados Unidos, Gast no contaba con secuencias filmadas de la pelea.
Gast obtuvo los derechos de la pelea y el permiso para utilizar su filmación del festival. El director Taylor Hackford filmó nuevas entrevistas con Mailer y Plimpton, el director Spike Lee, y el biógrafo de Alí, Thomas Hauser, que Gast utiliza para enhebrar la narración.
La película brinda nueva vida a una época en la historia de Africa y Estados Unidos, que ahora nos parece sorprendentemente cercana. Más que nada, "When We Were Kings" realiza con éxito un retrato cinematográfico de Mohammad Alí, un hombre que trascendió su propia vida. (FIN/IPS/tra-en/aw/yjc/mk/aq-jc/cr/97