AMERICA CENTRAL: Alertan sobre avance de narcotráfico

El fiscal de Colombia Alfonso Valdivieso llegó hoy a Honduras para alertar sobre el avance del narcotráfico en América Central, tras el duro golpe recibido por los carteles de la droga en México y Bogotá.

En el marco de una conferencia sobre democracia y corrupción promovida por el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo, Valdivieso pidió a las naciones centroamericanas que "se preparen fuertemente para combatir este flagelo"

"Todavía nuestras evidencias se basan en sospechas y denuncias, pero la verdad es que estos señores (los narcos) son como virus que se reproducen y tienen fuertes conexiones a todos los niveles, especialmente el político", afirmó.

Valdivieso, quien suscribió este viernes con la Fiscalía de Honduras un convenio de cooperación bilateral, expuso en la conferencia sobre la situación de su país en esta materia.

En Colombia, sostuvo, el narcotráfico creció en las últimas cuatro décadas en razón del aumento de la pobreza, señaló.

Al principio, el fenómeno pasó inadvertido y sólo se hizo notorio cuando de la noche a la mañana aparecieron personajes con riquezas dudosas que andaban en lujosos automóviles y haciendo propuestas indecentes.

Esta situación, sostuvo, "puede fácilmente reproducirse en los países centroamericanos y por eso es importante detectarlo a tiempo", dijo Valdivieso.

America Central dejó de ser desde los años setenta puente de la droga para convertirse en fuerte consumidor y existen evidencias de producción y laboratorios de procesamiento de cocaina, además de lavado de dinero, en la región, estimó.

Investigaciones realizadas en Honduras indican que el punto neurálgico de las operaciones de los narcotraficantes en el istmo es el llamado Tapón de Darién en Panamá, frontera natural con Colombia, desde donde la droga penetra hacia el conjunto de la región, incluido Belice.

Desde ese sector, los narcotraficantes arman y distribuyen sus redes de mini-arteles y de acuerdo a fuentes hondureñas de combate a las drogas conocen el territorio como la palma de su mano, siendo difícil investigar a fondo sus movimientos.

"Los colobianos aprendimos demasiado tarde la necesidad de una voluntad política al más alto nivel (para luchar contra el narcotráfico) pero aun así hemos dado muestras de cambio y puedo asegurarles que hoy los tenemos (a los naroctraficantes) aislados de la sociedad", aseguró.

A manera de anecdota comento que el nieto del capo mafioso Gilberto Rodríguez Orejuela, uno de los líderes del cartel de Cali, no encuentra una escuela en Colombia que lo quiera recibir. (FIN/IPS/tm/dg/ip/97

Archivado en:

Compartir

Facebook
Twitter
LinkedIn

Este informe incluye imágenes de calidad que pueden ser bajadas e impresas. Copyright IPS, estas imágenes sólo pueden ser impresas junto con este informe