SUDAN: Riesgo de guerra abierta con Etiopía, Eritrea y Uganda

El gobierno fundamentalista islámico de Sudán, enfrentado a una alianza opositora armada sin precedentes en el país, da pasos cada vez más arriesgados hacia una guerra abierta que podría involucrar a todo el noreste de Africa.

El régimen del presidente Omar Hassan al Bashir amenazó con declarar "zona colonizada" el norte de Uganda y con enviar de regreso a un millón de refugiados de Eritrea y Etiopía para que ataquen esos dos países.

Mientras tanto, Egipto continúa acusando a Jartum de respaldar a terroristas islámicos en su territorio y el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas considera la imposición de sanciones.

Luego de 14 años de lucha civil, la rebelión de cristianos y tradicionalistas africanos, que prevalecen en el sur de Sudán, contra el dominio del norte mayoritariamente árabe y musulmán se convirtió a fines de enero en un conflicto mucho más amplio.

La guerra iniciada en 1983 en el sur por el Ejército Popular de Liberación de Sudán (SPLA) contra el gobierno islámico cobró dimensión nacional en diciembre, cuando seis partidos de oposición con base en el exterior resolvieron tomar las armas.

Estos grupos, que proceden del norte y entre los que figuran el Partido de Unión Democrática y Umma, del ex presidente Sediq El Mahdi (derrocado en 1983 por Al Bashir), se aliaron con el SPLA en la Alianza Democrática Nacional (NDA).

La rebelión del SPLA, que comenzó en 1983, se restringió al sur del país, pero la NDA acercó la lucha militar a Jartum con la captura de poblados ubicados a apenas 600 kilómetros de la capital de este extenso país.

Estas incursiones se produjeron desde la frontera oriental, el límite con Etiopía y Eritrea, países a los cuales Sudán acusa de invadir su territorio.

De acuerdo con Jartum, la ofensiva en el este fue simultáneaen el norte del país. Museveni consideró este viernes que hizo todo lo posible para solucionar los problemas bilaterales pero fracasó.

"Creo que Sudán intentará ahora resolver todo en el campo de batalla. Esto es lrzas del gobierno podrían tomar represalias si Kampala mantiene su respaldo a los rebeldes.

Al Tayeb calificó al presidente de Uganda, Yoweri Museveni, de "antiárabe", y advirtió que, si no "quita sus manos de encima" de Sudán, Jartum podría declarar el norte del territorio ugandés "área colonizada" y brindar apoyo a los rebeldes de esa zona.

Kampala, a su vez, afirma que Sudán ya respalda a dos grupos insurgentes que operan en el norte del país. Museveni consideró este viernes que hizo todo lo posible para solucionar los problemas bilaterales pero fracasó.

"Creo que Sudán intentará ahora resolver todo en el campo de <162>>.

"Creo que Sudán intentará ahora resolver todo en e

Archivado en:

Compartir

Facebook
Twitter
LinkedIn

Este informe incluye imágenes de calidad que pueden ser bajadas e impresas. Copyright IPS, estas imágenes sólo pueden ser impresas junto con este informe