PAKISTAN: Abstención y desánimo en nueva elección parlamentaria

Los paquistaníes fueron hoy a las urnas por cuarta vez en menos de 10 años para elegir una nueva mayoría parlamentaria y un gobierno con vocación de estabilidad, pero la bajísima concurrencia a votar demuestra que el elector no confía en que una dirección renovada pueda completar su mandato.

Las primeras estimaciones ofrecidas por las encuestadoras revelaron que menos de un tercio de los 56 millones de electores ejercieron su derecho a votar, lo que significa una de las más altas abstenciones registradas desde el retorno a la democracia en esta nación de Asia meridional.

Pakistán ha estado más de 20 años -en diferentes ocasiones- bajo gobiernos militares, durante el medio siglo de su vida como Estado independiente.

Con un cuarto de millón de soldados vigilando el orden público, la votación se desarrolló de forma generalmente pacífica en los 40.000 colegios electorales. Según informes provenientes de Karachi, un militante político fue muerto en choques entre grupos rivales de esa ciudad portuaria del sur del país.

Alrededor de 1.800 candidatos disputaron en todo el territorio 214 escaños de la Asamblea Nacional. Fue suspendida la votación para tres bancas debido a la muerte de algún candidato en los distritos respectivos.

Junto con las elecciones parlamentarias se celebró la votación para elegir las asambleas estaduales de Punjab, Sindh, Frontera del Noroeste y Beluchistán.

En contraste con el escepticismo general, se registró un verdadero entusiasmo por votar entre la población de las siete regiones tribales donde el pueblo votó por primera vez.

Alrededor de 1,6 millones de personas de esas regiones -mejor conocidas como Areas Tribales Administradas por la Federación (FATA)- alcanzaron la condición de electores en esta oportunidad, por decisión del gobierno en funciones nombrado en noviembre para conducir el proceso electoral.

Los observadores políticos entienden que ninguno de los dos principales partidos, que en esta ocasión vuelven a disputar el poder, será capaz de formar gobierno con sus propias fuerzas.

Unos de ellos -el Partido Popular de Pakistán (PPP), que lidera la ex primer ministro Benazir Bhutto, cuya destitución en noviembre por el presidente Faruk Leghari provocó esta elección anticipada- protestó contra el procedimiento y afirmó que la votación será falseada por el gobierno en funciones.

En una intervención por televisión, un dirigente del PPP dijo este lunes que la cantidad de votantes resultó "terriblemente baja", lo que en su opinión aumenta la posibilidad de falsear el resultado.

Nawaz Sharif -jefe de la Liga Musulmana de Pakistán y también ex primer ministro-, cuyo partido se perfila como el primer grupo parlamentario singular en la nueva cámara de 217 escaños, declaró este lunes que buscará la cooperación del PPP, su más duro adversario político.

Además de comprometida en las encuestas a nivel nacional por el descrédito de su última administración, Bhutto puede encontrar problemas en su propio feudo político de Sindh, ante el desafío lanzado por su cuñada Ghinwa Bhutto, que encabezó una escisión del PPP.

En opinión de los expertos, la competencia de su cuñada – libanesa de nacimiento y viuda del hermano menor de Benazir, Murtaza Bhutto, quien fue muerto el año pasado en un tiroteo con la policía- podría favorecer al partido de Sharif. (FIN/IPS/tra-en/mu/arl/ip/97

Archivado en:

Compartir

Facebook
Twitter
LinkedIn

Este informe incluye imágenes de calidad que pueden ser bajadas e impresas. Copyright IPS, estas imágenes sólo pueden ser impresas junto con este informe