La recuperación económica iniciada en 1993 no modificó la tendencia de crecientes despidos en la economía formal de Brasil, que en los siete primeros años de esta década ya perdió 2.438.163 empleos, según datos oficiales.
Los datos del Ministerio del Trabajo, en base al registro de contrataciones y despidos en 496.964 empresas de todo el país, fueron divulgados este viernes por el diario Folha de Sao Paulo.
El año pasado se eliminaron 304.950 puestos de trabajo, pese a un crecimiento estimado de tres por ciento en el producto interno bruto. Hubo 8.530.463 despidos contra 8.225.513 admisiones de trabajadores, indicando también la elevada rotatividad de la mano de obra formal, cuyo total alcanza cerca de 25 millones.
Los años más terribles fueron los tres primeros, cuando se perdieron 2,2 millones de empleos, producto de la brutal recesión económica provocada por medidas antiinflacionarias del gobierno, que confiscó temporalmente la mayor parte de activos financieros de empresas y personas físicas.
La industria, el sector más afectado, sufrió una reducción de 8,9 por ciento en su producción en 1990. La caída prosiguió en los dos años siguientes, con 2,6 y 3,7 por ciento. En 1993 y 1994 se invirtió la tendencia, para un crecimiento de 7,5 y 7,6 por ciento.
El año pasado, el sector industrial contribuyó con casi la mitad de los despidos, pese a un crecimiento de 1,4 por ciento. También los bancos despidieron a muchos de sus empleados, adaptándose a la reducción de sus negocios, tras el control de la inflación logrado por el Plan Real desde 1994.
La estabilización de la nueva moneda brasileña, el real, lograda en julio de 1994, permitió una fuerte recuperación económica e incorporar al mercado de consumo millones de familias de las capas de menores ingresos.
Aún así, los empleos eliminados en ese período alcanzó 755.379. Sao Paulo, el área metropolitana más industrializada del país, fue también la más afectada por el desempleo, en un proceso que está transfiriendo empleos para los servicios y el sector informal.
Los trabajadores informales ya superan los del mercado formal, con registro en el Ministerio del Trabajo, según las últimas estadísticas. (FIN/IPS/mo/ag/if/97
