La agrupación humanitaria de Argentina Abuelas de Plaza de Mayo inició este lunes una querella por sustracción de menores contra ex oficiales de la última dictadura militar (1976-83), y otros responsables.
Seis de las madres de desaparecidos durante el régimen, que se dedican desde hace 20 años a buscar a sus nietos secuestrados o nacidos en cautiverio, basaron su pedido en que ahora tienen pruebas de los delitos cometidos.
En diálogo con IPS, la presidenta de la agrupación, Estela Carloto, explicó que la Cámara Federal que juzgó en 1985 a los ex comandantes por secuestro, torturas y homicidios, consideró que no había pruebas para acusarlos del robo de niños.
Pero a lo largo de los años, las abuelas encontraron a 57 menores de edad -sobre un total de 300 casos denunciados- que habían sido secuestrados y entregados ilegalmente a miembros de las fuerzas de seguridad, en su gran mayoría.
Asimismo, en 1995, apareció en la provincia de Córdoba un documento del Ministerio del Interior de abril de 1977 con "instrucciones sobre cómo proceder con los menores de edad hijos de detenidos-desaparecidos".
"Ahora sí estamos en condiciones de demostrar que la sustracción de menores también fue un delito cometido en forma sistemática y programada", aseguró Carloto, quien confía en que se irán agregando otras denuncias a la causa.
Además, las leyes de punto final y obediencia debida que liberaron de procesos legales a miles de suboficiales que participaron de la represión clandestina, establecen de manera explícita que no alcanzan a aquellos que hubieran robado niños.
Por el momento, las abuelas que presentaron la querella – Carloto es una de ellas- señalaron a seis militares, entre ellos el ex comandante Reynaldo Bignone y el ex ministro del Interior general Albano Harguindeguy.
Sin embargo, Carloto advirtió que a medida que se agreguen casos también acusarán a otros responsables y se citará a testigos "claves" como el ex capitán Adolfo Scilingo, quien admitió haber arrojado al mar a unos 2.000 prisioneros vivos.
"Va a ser difícil, sabemos que es una batalla que recién comienza y que va a ser muy duro, pero queremos forzar al Estado a que dé la información para conocer el paradero del resto de los casos de menores desaparecidos", declaró.
Muchos de los hoy jóvenes que fueron encontrados por las Abuelas formaron la agrupación humanitaria Hijos. Pero aún quedan muchos casos sin esclarecer. Durante la dictadura hubo al menos 10.000 desaparecidos, según registros oficiales.
En este sentido, la Corte Suprema de Justicia emitió la semana pasada un fallo que obliga a los menores que se sospecha son hijos de desaparecidos a realizarse el test genético. El fallo fue considerado otra buena noticia para las abuelas. (FIN/IPS/mv/dg/ip-hd/96