Las protestas de la oposición continuarán en el año nuevo hasta que el presidente de Serbia, Solobodan Milosevic, reconozca la victoria de la coalición Zajedno en las elecciones municipales del mes pasado, anunciaron portavoces de la organización.
La violencia reina durante las manifestaciones antigubernamentales que se prolongan desde hace más de un mes en Belgrado y otros puntos del país, en protesta de Zajedno por la anulación de los comicios en 15 de las 18 mayores ciudades serbias, realizados el 17 de noviembre.
La represión policial y los esfuerzos del gobierno por detener a los manifestantes no producirán un cambio de estrategia, afirman dirigentes de Zajedno.
Este fin de semana más de 70 personas debieron ser trasladadas a un centro médico de Belgrado, tras haber sido seriamente golpeadas por la policía.
Entre ellas se encontraban camarógrafos de canales extranjeros de televisión, operadores de vídeo, periodistas locales e independientes -de Radio B92 y Nasa Borba-, y varios padres que concurrieron a la protesta con sus hijos de 10 o 12 años.
Un simpatizante de Zajedno que el martes recibió un balazo en la cabeza en enfrentamientos con una manifestación a favor del gobierno continúa en coma. El mismo día, otro hombre murió tras haber sido supuestamente golpeado por seguidores del gobierno.
Miles de efectivos de fuerzas policiales se despliegan en Belgrado cada tarde, antes de las manifestaciones de Zajedno, y en varias ciudades provinciales de Serbia lo hacen unidades regulares de policía.
La mayoría de los analistas coincide en que la situación mantiene la máxima tensión, mientras ninguna de las dos partes está dispuesta a entregarse.
Zajedno afirma que Milosevic se propone crear "un estado de emergencia ", y en una declaración del fin de semana se preguntó "¿hasta cuándo Milosevic utilizará cordones policiales para evitar que los ciudadanos serbios vivan normalmente?".
La declaración prometió que las protestas se realizarán en vísperas del año nuevo, y la Navidad y el año nuevo serbios, con fechas de la Iglesia Ortodoxa del 6 y 13 de enero.
"Estamos seguros de que ninguna fuerza puede evitar que la gente exprese su voluntad. La dictadura no puede sobrevivir en Serbia", afirmó la declaración.
Vuk Draskovic, uno de los líderes de Zajedno, acusó a la policía de matar a Predrag Stracevic, el manifestante que murió el martes pasado tras un supuesto enfrentamiento con seguidores de Milosevic. Su muerte fue mantenida en silencio durante dos días por autoridades médicas.
"Según informaciones en nuestro poder, fue asesinado por la policía", dijo Draskovic durante una manifestación contra el gobierno en la que participaron 50.000 personas en el centro de Belgrado, a una temperatura de 12 grados centígrados bajo cero.
Starcevic fue sepultado el sábado en Belgrado, en un funeral en el que participaron decenas de miles de personas, incluyendo dirigentes opositores. Ese día no se realizaron manifestaciones de Zajedno.
Un equipo de la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa (OCSE) anunció este fin de semana que la oposición fue la real ganadora de las elecciones en 14 ciudades y pueblos serbios.
Presidida por el ex presidente de gobierno español Felipe González, la misión de la OCSE concluyó que la coalición Zajedno ganó las elecciones locales en 13 de los centros provinciales y en Belgrado.
González dijo a la prensa en Ginebra que las razones dadas por cortes serbias para justificar la anulación de las elecciones están basadas en argumentos "que ningún país democrático podría aceptar".
El informe de la OCSE afirmó que Milosevic obtuvo una mayoría de votos en las elecciones generales y triunfó en todas las áreas, a excepción de las disputadas. (FIN/IPS/tra-en/vpz/fn/lp/ip-hd/96
