La organización guerrillera Movimiento Revolucionario Tupac Amaru (MRTA) liberó en las últimas horas del domingo a 225 rehenes, y anunció que los 145 restantes quedarán cautivos hasta que el gobierno del presidente Alberto Fujimori libere a los 458 emerretistas presos.
Según un comunicado leido en la puerta de la embajada japonesa, siguen en calidad de rehenes los peruanos que ocupan posiciones de gobierno, asi como parlamentarios, militares y policias.
Nestor Cerpa, jefe del grupo guerrillera que tomó la embajada japonesa el martes 17, liberó a los diplomáticos europeos, estadounidenses, asi como de Cuba y Panamá que tenía en calidad de rehenes, pero retuvo como cautivos a los representantes de paises asiáticos y latinoamericanos y empresarios japoneses.
Con esta masiva liberación de prisioneros, entra en una nueva fase la crisis de la toma de la embajada japonesa, que demostró la vigencia de una organización guerrillera que oficialmente era considerada liquidada.
Con los 145 rehenes que aún quedan en su poder, Nestor Cerpa, proseguirá demandando la libertad de todos los mandos politicos de su partido, presos en una inhospita carcel en el altiplano peruano, y de la casi totalidad de sus combatientes, ofreciendo la posibilidad de iniciar tratativas hacia una paz definitiva.
Según los analistas independientes, incluyendo algunos ex rehenes liberados en los días anteriores, el MRTA estaría dispuesto a abandonar las armas y convertirse en un partido de actuación legal si Fujimori concede libertad a todos los militantes de dicha organización que se encuentran presos.
La liberación masiva tomó de sorpresa a los periodistas apostados en la puerta de la embajada, quienes se percataron de la ooperación cuando cuatro grandes autobuses, uno de ellos blindado, ingresaron a la zona bajo custodia policial y se situaron frente a la puerta de la embajada japonesa.
La presencia de este vehiculo hizo suponer a los periodistas y los televidentes que también el comando guerrillero abandonaba la sede diplomatica, y consecuencia significaba la solución total de la crisis política generada por el secuestro de unas 600 personas que asistían a una recepcion en la embajada nipona.
Pero el número y características de los rehenes retenidos y por lo expuesto en el comunicado que emitió el MRTA y fue leido por un funcionario de la cancilleria peruana, demostraron que el problema no ha concluido.
Fujimori y el guerrillero Cerpa seguiran enfrentados en una lid que, salvo alguna provocación o descontrol emocional de alguno de los protagonistas, proseguirá en terminos políticos, pues ambos han descartado una solución militar de la crisis.
El comunicado, condena el tono duro del presidente Alberto Fujimori, quién en su comunicado del sabado advirtió que no cedería a la extorsión armada del MRTA y no daría libertad a los 458 emerretistas presos en varias cárceles del interior del país.
Fujimori advirtió que su gobierno contemplaría la propuesta de iniciar conversaciones de paz despues que todos los rehenes sean liberados, pero prometio a los integrantes del comando guerrillero que se les permitiría abandonar el país.
El MRTA critica también que el presidente peruano haya concedido amnistía a militares y policias acusados de crímenes contra los derechos humanos y sea implacable con los luchadores sociales.
Michel Minning, representante de la cruz Roja Internacional en Perú, quién jugó activo papel mediador en la crisis y obtuvo la liberación de las tres cuartas partes de los 600 personas tomadas por el MRTA, anunció que proseguirá sus humanitarias gestiones por los rehenes aún en cautiverio. (FIN/IPS/AL) 05.05 GM
