El plan del gobierno de Ecuador de implantar a mediados del año próximo un sistema de libre convertibilidad monetaria, al estilo del que se experimentara con éxito en Argentina, encontró su primer obstáculo en el parlamento unicameral, que pidió aclaraciones y más tiempo.
El presidente, Abdalá Bucaram, decidió el miércoles, ante la oposición de diversos grupos parlamentarios, retirar del Congreso el paquete de reformas tributarias que envió la semana pasada con carácter de urgente y que sientan las bases para que la convertibilidad entre en vigencia el 1 de julio de 1997.
El sistema de cambio propuesto consiste en asegurar que cada unidad que circule de la moneda local, el sucre, se encuentre respaldada por la reserva en divisas.
Esto obliga a que el Estado mantenga "una férrea disciplina fiscal", según Bucaram, pues la estabilidad de las reservas determinan el éxito o fracaso de este esquema.
En el primer paquete de reformas que presentó Bucaram, y que retiró posteriormente, se encontraba la ampliación de la base tributaria y el aumento de los impuestos a bebidas alcohólicas y cigarrillos, en 240 y 300 por ciento respectivamente.
Asimismo se contemplaba la aplicación del impuesto al valor agregado a los artículos de primera necesidad exentos de ese impuesto hasta ahora, como alimentos y medicinas, y un cargo especial a todos los vehículos, equivalente a dos por ciento de su valor comercial.
"Retiré el proyecto para facilitar el trabajo de los legisladores", señaló Bucaram, "pues ahora se atraviesan las fiestas de la fundación de Quito y el programa requiere un análisis detenido por parte del Congreso".
El retiro del proyecto se anunció después de una reunión con el presidente del parlamento, Fabián Alarcón, quien consideró que esta decisión "quitará presión a los congresistas".
Las reformas al régimen tributario debían ser analizadas y aprobadas o rechazadas por el parlamento para el día 20, y en caso contrario hubieran entrado en vigencia automáticamente.
Para los partidos opositores al gobierno, el retiro sorpresivo de las reformas tributarias, se debe al rechazo de "diversos sectores de la sociedad y al grupo parlamentario que se formó para vetar las absurdas y autoritarias leyes", comentó Luis Macas, jefe del bloque parlamentario indígena.
Las propuestas de Bucaram "fueron enviadas a la comisión de presupuesto del parlamento para que ahí se aprueben irremediablemente, pues dicha comisión está integrada en su mayoría por el partido gobiernista", considero Heinz Meller, diputado por el derechista Partido Social Cristiano (PSC).
Sin embargo, continuó Meller "nosotros ejercimos presión para que este paquete fuese revisado por el pleno del Congreso, es decir, por todos los diputados y no sólo los del partido de gobierno".
De acuerdo al proyecto, cuando la convertibilidad entre en vigencia se eliminarán tres ceros al sucre y se establecerá un tipo de cambio fijo respecto al dólar, en lugar del esquema de bandas de flotación que rige la política cambiaria de la actualidad.
La relación de la moneda nacional con la divisa norteamericana será de cuatro sucres por un dólar, lo que significa una devaluación de 14 por ciento.
La convertibilidad "permite un crecimiento económico mayor y la reducción de los índices inflacionarios", arguyó Bucaram el pasado domingo al realizar el anuncio oficial de su proyecto, luego de que fuera postergado en seis ocasiones desde que asumió la presidencia hace cuatro meses.
"Alcanzaremos un crecimiento anual superior al seis por ciento del producto interno bruto y reduciremos el nivel inflacionario de 25 por ciento, que actualmente tenemos, a un sólo dígito", prometió el mandatario.
Este sistema se aplicó en Argentina en 1991 como una estrategia para combatir la hiperinflación, que había llegado a 4.923 por ciento anual. Actualmente Argentina comparte los niveles inflacionarios de Estados Unidos, que no superan el tres por ciento anual.
Sin embargo, los sectores de oposición al gobierno de Carlos Menem atribuyen a la convertibilidad la recesión productiva y los altos índices de desempleo, que en este año alcanzan a 19 por ciento de la población económicamente activa, algo inusitado en ese país sudamericano.
"Al no existir la posibilidad de devaluar la moneda, los ajustes de la economía se realizan a través del desempleo y la recesión productiva, como sucedió en Argentina", reconoció Bucaram.
Por este motivo, el gobierno de Ecuador planteó las reformas tributarias, fiscales, laborales y políticas, que intentan "evitar los errores cometidos en otros países y aprovechar los beneficios de la convertibilidad", según el primer mandatario.
El proyecto de reformas tributarias volverá a presentarse al Congreso luego de ser sometido a revisión y posteriormente se enviarán las otras propuestas en el plano laboral, financiero y fiscal, informó Bucaram. (FIN/IPS/mg/jc/ip/96
