El periodista turco Isik Yurtcu paga su profesionalismo con una condena que lo mantendrá en prisión hasta entrado el próximo siglo, pero eso no le ha impedido convertirse en el más honrado "caballero de la prensa" de su país.
Esta semana, Yurtcu agregó a sus méritos el título de Periodista del Año, otorgado por la organización Periodistas Sin Fronteras (PSF), con sede en París. Sólo el mes pasado, obtuvo la misma distinción del Comité para la Protección de los Periodistas, de Nueva York.
El periodista declaró en un mensaje enviado por fax a IPS que está "sumamente satisfecho" por el premio, que acepta como "un gesto internacional de apoyo a la causa más amplia de la libertad de expresión en Turquía".
"En un país donde no existe la libertad de expresión, no se puede gozar de ninguna otra libertad", agregó.
La corresponsal de IPS en Estambul, Nadire Mater, viajó el miércoles a París para recibir el premio en representación de Yurtcu.
Varios periodistas del diario pro-kurdo dirigido por Yurtcu, el proscrito Ozgur Gundem, sufrieron ataques, y muchos otros fueron asesinados.
Yurtcu manifestó que aún puede sentir la respiración agonizante de sus colegas asesinados: Recai Unal, Metin Goktepe, Abdi Ipekci, Ugur Mumcu, Hafiz Akdemir, Musa Anter, Cetin Emec, Turna Dursun, Huseyin Deniz, Izzet Kezer, Nazim Babaoglu y Ferhat Tepe.
El periódico, proscrito en enero de 1994, simpatizaba con los kurdos turcos que reclaman autonomía regional en el sudeste del país, una posición que le colocó directamente bajo el fuego de Ankara.
Las fuerzas de seguridad del gobierno luchan contra los guerrilleros del Partido Kurdo de los Trabajadores desde 1984, en una guerra que costó ya unas 22.000 vidas y desplazó a cientos de miles de civiles inocentes.
Se prevé que el galardón le será entregado este domingo en la prisión de Sakarya, en el noroeste de Turquía. La distinción va acompañada de un premio de 50.000 francos (unos 9.700 dólares).
Yurtcu, de 52 años, un turco no kurdo, ha estado en la cárcel dos años desde que recibió su sentencia a ocho años de prisión por ser el responsable de una publicación que violó repetidamente las leyes que prohíben la promoción del "separatismo", desde la primera edición, en junio de 1991, hasta su cierre.
El periodista también fue condenado al pago de una multa de 10.000 dólares, que si no es satisfecha le costará otros tres años de prisión.
Aun si es liberado, no podrá volver a dirigir un diario, porque las actuales leyes de Turquía impiden que un ex recluso asuma la responsabilidad de un periódico.
Sus distinciones profesionales incluyen los galardones del Consejo de Prensa Turco, la Asociación de Periodistas Turcos, la Asociación de Periodistas Contemporáneos y la Unión de Periodistas Turcos. También es miembro honorario de la Unión de Escritores de Turquía.
Todos los que trabajaron con él destacaron sus cualidades periodísticas y su profesionalismo al explicar la decisión de Periodistas Sin Fronteras de lanzar en 1994 una campaña mundial por su liberación y de premiarlo este año.
"Estamos determinados a continuar la campaña hasta que Isik sea liberado", declaró a IPS el secretario general de PSF, Robert Menard.
PSF también reclama la liberación de otros seis periodistas encarcelados: Naile Tuncer, Salih Bal, Emine Buyrukcan, Guray Ulku, Alper Gormus y Muteber Yildirim.
Así mismo, el grupo exige la derogación del artículo ocho de la ley anti-terrorismo y el artículo 312 del Código Penal de Turquía, en base a los cuales fueron juzgados al menos 3.000 periodistas y escritores. (FIN/IPS/tra-en/ak/rj/ml/hd/96
