Las esposas de mandatarios y representantes de 23 países de América iniciaron hoy en La Paz una reunión de cuatro días destinada a elaborar un plan de acciones en favor de la mujer y la infancia que serán ejecutadas por los gobiernos, con la cooperación de organismos internacionales.
La reunión busca definir tareas concretas para la salud y la educación de la mujer y la niñez, bajo los principios de desarrollo integral, equidad, democratización, información, conocimiento y participación familiar y social.
Pero organizaciones no gubernamentales bolivianas criticaron su "carácter asistencialista", que perjudica "el avance de las mujeres".
La cita sobre "los derechos de la mujer y la niñez en el marco del desarrollo humano sostenible", a la que asiste la esposa del presidente de Estados Unidos Hillary Clinton, es complementaria a la Cumbre Hemisférica sobre Desarrollo Sostenible, los días 7 y 8 en Santa Cruz de la Sierra, Bolivia.
A diferencia de las anteriores cinco reuniones de las esposas de presidentes, la de La Paz dará inicio a un ciclo de acciones a las que los gobiernos podrán adscribirse de acuerdo a su interés y necesidades, según la secretaría pro témpore de este grupo, dirigida por el depacho de la primera dama de Bolivia.
"No se trata de hacer hermosos discursos y reflexiones, sino de acordar una agenda de trabajo práctica, con indicadores, con metas concretas que permitan efectivamente el apoyo de las primeras damas en favor de las mujeres y la niñez" de la región, dijo Carola Muñoz, coordinadora técnica de la reunión.
Los temas que se analizarán en esta conferencia tienen proyectos regionales respaldados y comprometidos con la cooperación internacional, afirmó Muñoz.
Uno de esos casos es un proyecto regional para disminuir la muerte por anemia, que Bolivia presentó en las reuniones preparatorias de la conferencia.
Con el apoyo de Canadá y el Programa Mundial de Alimentos, ese proyecto logró un financiamiento de 1,8 millones de dólares para eliminar la carencia de hierro en la alimentación a través de su incorporación en el trigo y la industria molinera.
El presidente de Bolivia, Gonzalo Sánchez de Lozada, respaldó la medida este martes con un decreto supremo que crea el Programa Integrado de Prevención y Control de las Anemias Nutricionales, dirigido principalmente a combatir la desnutrición de la mujer embarazada y los niños.
Algunos de los objetivos de la Sexta Conferencia son contribuir al alcance de la meta de eliminación del sarampión de América para el año 2000, promover el acceso de las niñas y mujeres a los programas de educación formal y no formal a fin de asegurar su plena participación en la sociedad.
Las esposas de los presidentes también se proponen contribuir a la prevención y eliminación de todas las formas de violencia contra las mujeres y los niños, a través de la reglamentación y adopción de los mecanismos necesarios, así como también fomentar el respeto de los derechos humanos.
La conferencia es vista por organizaciones no gubernamentales bolivianas con desconfianza por su "carácter asistencialista, que perjudica de gran manera el avance de las mujeres".
"Vemos esta Cumbre de Primeras Damas con mucha preocupación. Creemos que no por ser primeras damas tienen que asumir el brazo social de las políticas neoliberales de sus esposos", dijo a IPS Ximena Machicao, directora del no gubernamental Centro de Información y Desarrollo de la Mujer (CIDEM).
Según ese criterio, las política públicas sociales para las mujeres deben estar en manos de organismos del Estado que tengan poder de decisión, un marco institucional y recursos financieros.
Machicao es partidaria de desmitificar el papel de las esposas de los presidentes en América Latina.
"Darle tanta fuerza y poder a las primeras damas está planteando serios peligros de retroceder en materia de políticas públicas que en verdad garanticen que las mujeres nos convirtamos en sujetos de desarrollo, y no en sujetos de políticas asistencialistas", afirmó.
En forma simultánea a la Sexta Conferencia de las Primeras Damas, en La Paz se desarrollan protestas y manifestaciones de la Central Obrera Boliviana (COB) en contra de una impopular Ley de Pensiones promulgada por el gobierno de Sánchez de Lozada el viernes pasado.
Dirigentes de la COB no aceptaron la "tregua social" que pidió el gobierno y, por el contrario, señalaron que demostrarán a los presidentes de América la pobreza y miseria de este país.
Tras su reunión de La Paz, las esposas de los mandatarios viajarán el sábado a Santa Cruz de la Sierra. (FIN/IPS/jcr/ag/ip- pr/96