YUGOSLAVIA: Milosevic gana elecciones con alta abstención

La coalición de gobierno encabezada por el presidente de Yugoslavia, Slobodan Milosevic, ganó las elecciones celebradas este domingo, pero 39 por ciento de los electores habilitados optó por la abstención, informaron las autoridades.

El Partido Socialista de Milosevic (SPS), aliado a Izquierda Unida (JUL) que lidera su esposa Mira Markivic y el diminuto Nueva Democracia (ND), obtuvo, según las últimas cifras, 45 por ciento de los votos, cuando se había escrutado este lunes 55 por ciento de los pronunciamientos.

Entre cerca de 2.822.000 votos contabilizados, 1.322.000 optó por la coalición SPS-JUL-ND. La coalición Zadejno (Juntos), que reúne a cuatro de los principales partidos opositores, obtuvo 687.000 sufragios.

Por su parte, el ultranacionalista Partido Radical Serbio (SRS), liderado por Vojislav Seselj, se ubicó en tercer lugar, con 537.000 votos.

Pero apenas votaron 4,5 millones de ciudadanos, alrededor de 61 por ciento de los 7,5 millones de habilitados. Casi la totalidad de los dos millones de albaneses étnicos, opuestos al dominio serbio sobre la disputada provincia de Kosovo, se abstuvieron.

Los 600.000 refugiados adultos de nacionalidad serbia en Croacia y Bosnia-Herzegovina no pudieron votar, debido a una ley que les retiró en julio la ciudadanía yugoslava.

Esta medida jugó a favor de Milosevic. Los refugiados pudieron votar en 1992 y 1993, cuando respaldaron el llamado del presidente a defender con las armas los "intereses nacionales".

Pero Milosevic los dejó de lado a cambio del proceso de paz iniciado en Dayton, Estados Unidos, en diciembre de 1995, pues esas colonias habían fomentado la guerra en sus lugares de residencia.

Se prevé que los resultados definitivos de las elecciones se conocerán este jueves.

De acuerdo con las cifras conocidas, la JUL ingresará por primera vez al parlamento. "Vamos a un sistema del tipo rumano encabezado por el dictador Nicolae Ceaucescu y su esposa Elena, pero al estilo serbio", dijo un analista en Belgrado que reclamó reserva sobre su identidad.

"Nuestro ingreso al parlamento cambiará el clima político", dijo, por su parte, el candidato de la JUL a alcalde de Belgrado, Slobodan Cerovic.

El Partido Democrático de los Socialistas (DPS) proclamó su victoria en 11 de los 14 distritos electorales del estado federado de Montenegro.

Serbia cuenta con 108 legisladores y Montenegro con 30 en la Cámara de Ciudadanos, el parlamento federal yugoslavo, considerado por los observadores un sello de goma para las decisiones tomadas por Milosevic y sus aliados.

La presidencia de la federación no estaba en juego en estas elecciones, pues Milosevic dejará el cargo en diciembre de 1997, pero la votación tiene importancia política.

El mandatario requiere una mayoría de dos tercios en la Cámara de Ciudadanos, para lo cual podría contar con el respaldo del DPS montenegrino, si pretende tener éxito en la reforma constitucional que le permitiría la reelección.

La coalición gobernante fue fundada cuando las encuestas demostraban una caída en el respaldo al SPS. Su campaña se basó en la paz obtenida en Dayton y en promesas de recuperación económica tras el fin de las draconianas sanciones dispuestas por Naciones Unidas.

La alianza SPS-JUL-ND contó en los últimos meses con el respaldo evidente de los medios de comunicación oficialistas, en especial de la estatal emisora TV Belgrado y el diario Politika, del cual es propietario Dragan Antic, amigo de Markovic.

Los partidos opositores, mientras tanto, no contaron con espacio alguno en esos dos medios.

La recuperación económica fue una consigna popular en un país donde, de acuerdo con la Cruz Roja, 28,9 por ciento de la población vive por debajo de la línea de pobreza a pesar de que antes de 1991 gozaba de las mejores condiciones de vida entre los países de Europa oriental.

El salario promedio representa apenas 141 dólares mensuales, según datos de septiembre. Existen 819.467 desempleados, mientras 2.065.899 personas tienen trabajo.

Esta situación provocó una ola de protestas por salarios no pagados en ciudades industriales como Nis, Kagujevac y Belgrado.

Los economistas pronostican que no se registrarán avances si no se atrae inversión extranjera y reformas que inyecten 2.500 millones de dólares al año en el mercado. Para colmo, Yugoslavia aún afronta la marginación del circuito internacional de instituciones financieras.

El producto bruto interno de la federación no crecerá, según las previsiones, más de seis por ciento este año. En ese caso, el más optimista, alcanzará 15.500 millones de dólares, 47 por ciento del nivel anterior a 1991.

El crecimiento pronosticado será muy inferior a 12,5 por ciento, la meta anunciada por el gobierno de Milosevic.

La crisis económica podría tener influencia sobre la segunda ronda de las elecciones municipales celebradas el domingo, prevista para dentro de dos semanas.

Esa competencia será más dura, porque los problemas internacionales no se considerarán y la coalición que ganó las elecciones no opera a nivel local. Las 189 municipalidades podrían convertirse en un campo de batalla entre el SPS y la JUL.

Ninguno de los 76 observadores extranjeros mencionó irregularidades en la elección, pero la coalición opositora Zajedno se quejó de intimidaciones y amenazas a los opositores a la coalición SPS-JUL-ND en pequeños poblados.

"No se permitió a los representantes de Zajedno participar en el escrutinio en algunos lugares, aunque eran integrantes de las comisiones electorales locales", afirmó este lunes el portavoz de la coalición, Ivan Kovacevic.

Para la mayoría de los analistas, el resultado de las elecciones no fue sopresivo en un país donde no existe tradición de voto contra el poder.

"La gente está apenas preparada para votar por aquellos que ya conocen, pues saben lo que pueden esperar de ellos", dijo el periodista Dejan Djordjevic.

Vuk Draskovic, líder del Movimiento de Renovación Serbia, el principal partido de oposición, recordó en ese sentido el diálogo que tuvo con un campesino a quien le preguntó qué votaría.

"Votaré al partido de Milosevic", dijo el campesino. "¿Y por qué no vota por el mío?", le preguntó Draskovic.

"Votaré por su partido cuando usted llegue al poder", le contestó. (FIN/IPS/tra-en/vpz/rj/mj/ip/96

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