El presidente de Colombia, Ernesto Samper, se mostró hoy confiado en que las relaciones con Estados Unidos mejorarán tras las elecciones que de este martes.
Samper afirmó que luego de los comicios estadounidenses espera que cambie la actitud de Washington y "haya un reconocimiento a la lucha (contra el narcotráfico) que sincera y muy solitariamente está librando Colombia".
El mandatario manifestó que las relaciones bilaterales están "en vías de normalización" y Colombia está cumpliendo con su agenda en materia de inversión, comercio y lucha contra las drogas.
No obstante, reiteró que las relaciones bilaterales deben darse sobre la base de "un respeto al derecho de Colombia de decidir sobre sus asuntos internos".
El embajador de Estados Unidos en Colombia, Myles Frechette, indicó que el mejoramiento de las relaciones entre Washington y Bogotá depende de los proyectos de ley contra el narcotáfico en curso actualmente en el Congreso.
Las relaciones bilaterales comenzaron a deteriorarse al comienzo del gobierno de Samper, en agosto de 1994, con la aparición de los llamados "narcocasetes", en los que el Cartel de Cali ofrecía dinero para la campaña electoral del mandatario.
El momento más crítico se dio en junio pasado, cuando el gobierno de Estados Unidos canceló la visa de Samper tras haber sido absuelto por el Congreso de las denuncias formuladas por la Fiscalía General.
Los proyectos de ley a estudio del Congreso buscan la refoma del artículo 35 de la Constitución, que prohibe la extradición de ciudadanos colombianos, el aumento de penas para los narcotraficantes y la extinción de dominio para sus bienes.
Frechette, quien pidió además que se apruebe la extradición retroactiva para que contemple a los narcotraficantes actualmente detenidos, dijo que estos proyectos no sólo son importantes para Colombia, sino para toda la comunidad internacional.
Estas declaraciones causaron gran malestar en el Congreso, donde se las calificó de "injerencia indebida" del diplomático estadounidense en los asuntos internos de Colombia, y motivaron que la ministra de Relaciones Exteriores, María Ema Mejía, le pidiera una explicación.
Frechette dijo que su pronunciamiento fue "mal interpretado por los congresistas" y que su intención fue "elogiar el gobierno del presidente Samper" por haber presentado "una iniciativa tan buena".
Sin embargo, el prununciamiento del representante diplomático de Estados Unidos fue interpretado por una fuente gubernamental como un indicador de lo que puede recibir Colombia de Washington en lo que le resta de gobierno de Samper. (FIN/IPS/yf/ag/ip/96