La destitución de la primera ministra de Pakistán, Benazir Bhutto, fue bien recibida por la Bolsa de Valores de Karachi (KSE), pero los inversores son cautelosos acerca de los efectos a largo plazo.
Las acciones se dispararon este martes, un día después de que el presidente Farooq Leghari cesó al gobierno. El índice de la KSE, el principal mercado de valores del país, aumentó 80 puntos, con un retorno de 80 millones de dólares.
"El cese del gobierno fue interpretado por el mercado como un muy buen cambio. La gente está satisfecha pues se considera que lo peor de la historia de Pakistán se acabó", sostuvo Yasin Lakhani, uno de los corredores más importantes de la KSE.
El intercambio se interrumpió el martes 5, feriado religioso en Pakistán, pero los corredores afirmaron que el precio de las principales acciones subieron en el intercambio extraoficial durante las horas posteriores al anuncio de la destitución de Bhutto.
Pero será "una correción a corto plazo", opinó un analista económico que reclamó reserva sobre su identidad respecto del aumento súbito del índice bursátil.
"El mercado podrá ganar fortaleza sobre la especulación pura en los próximos días y el índice sumaría entre 100 y 200 puntos. Pero entonces daría un respiro con la toma de utilidades", dijo, por su parte, el experto Jehanzeb Naseer.
Los operadores atribuyen al gobierno de Bhutto la actual debilidad de la economía de Pakistán. Estimaciones extraoficiales sitúan la inflación en más de 20 por ciento. El último informe del Banco Mundial ubica el déficit fiscal en una cifra sin precedentes de 4.200 millones de dólares.
"El cambio nos da la oportunidad de estabilizar nuestros negocios", dijo el exportador de vestimenta Aziz Rajput.
"No queremos que esta gente regrese al poder. Recibimos el cambio con un respiro de alivio", declaró el presidente de la Cámara de Comercio de Pakistán, Ilyas Bilour.
Ese alivio es tangible, pero todos esperan lo que sucederá en las próximos meses. El presidente Leghari, quien hizo uso de poderes especiales para destituir al gobierno, nombró a Miraj Khalid como primer ministro provisional y anunció elecciones para el 3 de febrero próximo.
Khalid fue rector de la Universidad Islámica de Islamabad y portavoz de la Asamblea Nacional en dos oportunidades.
Los corredores de bolsa y analistas empresariales pronostican que quienes toman decisiones respecto de fondos financieros asiáticos querrán estar seguros sobre la continuidad de los cambios en la política del gobierno.
"Si el mercado no se comporta de forma positiva, estas ganancias habrán sido de corta vida", sostuvo un corredor.
Las grandes compañías paquistaníes también son cautelosas. "Quienquiera que asuma el poder enfrentará dificultades", opinó Anwar Tata, conductor del poderoso conglomerado Tata, para quien la destitución de Bhutto recibirá apoyo del empresariado únicamente si demuestra su "legalidad".
Casi todos consideran que la corrección de la marcha de la economía insumirá tiempo, a pesar de que el gobierno interino tomó medidas rápidas para abatir el déficit.
En primer término, el primer ministro interino Khalid anunció la próxima revocación de los contratos de trabajo en beneficio de funcionarios públicos ya retirados.
También fueron despedidos más de 15 asesores especiales de Bhutto, entre ellos V. A. Jafarey, el guró de Bhutto en materia económica y financiera, y seguramente les seguirán otros funcionarios designados por el gobierno destituido.
A Jafarey se le atribuye mal manejo de la economía, en especial la suspensión de un crédito multimillonario del Fondo Monetario Internacional (FMI), firmado por Bhutto apenas una semana antes de su cese.
Altos funcionarios sostuvieron que se suspenderá la aplicación de las últimas decisiones del gobierno destituido hasta que se definan las políticas de las nuevas autoridades.
Entre los nuevos asesores del gobierno figuran dos altos funcionarios del Banco Mundial, el vicepresidente Shahid Javed Burki y el director Ishrat Hussain.
Una de sus primeras tareas será la firma de un acuerdo con el FMI que había sido negociado por el gobierno anterior.
"Aún debemos decidir si cumpliremos algunos requisitos del FMI para la firma del acuerdo, aunque no prevemos grandes cambios", dijo uno de los pocos altos funcionarios que permanecerá en su cargo tras la destitución de Bhutto. (FIN/IPS/tra-en/aa/an/mj/ip if/96
