Los portugueses deberían regresar a Mozambique para "invertir con fuerza y de esa manera colaborar con la consolidación de la paz y la democracia", afirmó hoy a su arribo a esta capital el líder opositor Afonso Dhlakama.
Dhlakama, presidente de la Resistencia Nacional de Mozambique (RENAMO), llegó este sabado a Lisboa procedente de Maputo, para una visita de nueve días, destinada a cumplir una vasta agenda de encuentros con políticos y empresarios portugueses.
Para asegurar el desarrollo de Mozambique, "será necesario el concurso portugués, mediante grandes inversiones empresariales", afirmó el presidente del mayor partido de oposición de la más poblada de las ex colonias lusitanas de Africa.
Durante su larga permanencia en Portugal, Dhlakama celebrará reuniones con el jefe del Estado, Jorge Sampaio, el primer ministro, Antonio Guterres, el presidente del parlamento, Antonio de Almeida Santos, el canciller Jaime Gama y el secretario de Estado para la cooperacion, José Lamego.
Asimismo, celebrará reuniones con los líderes de los partidos políticos y con los alcaldesm Joao Soares, de Lisboa, y Fernando Gomes, de la industrial ciudad de Oporto, en el norte del pais.
En el ámbito personal, Dhlakama será recibido por el ex presidente portugués y lider histórico socialista Mario Soares y por el cardenal patriarca de Lisboa, Antonio Ribeiro.
Su agenda en el sector privado, contempla encuentros con las directivas de las asociaciones industriales de Portugal en general y de Oporto en particular, y con el presidente de la sociedad Cabora Bassa, la represa hidroeléctrica que constituye la mayor empresa portuguesa en Mozambique.
Según Dhlakama, es necesario solicitar el apoyo a la democracia "porque en Africa no existen las estructuras económicas independientes capaces de consolidarla".
Aclaró que no va a pedir dinero porque "Africa hace parte de la lista negra de Europa" debido a que los más importantes líderes del continente "no han cumplido los programas".
"Lo que sí voy a decir, es que la RENAMO y toda la oposición en Mozambique no tienen condiciones para poder funcionar", dijo el político opositor, por lo que solicitará material y apoyo técnico para la formación de cuadros partidarios.
Mozambique se independizó en 1975, tras un año de preparación para el traspaso del poder con el Movimiento de las Fuerzas Armadas (MFA), que en abril de 1974 depuso a la dictadura corporativista de Antonio de Oliveira Salazar-Marcello Caetano, que gobernó Portugal desde 1926.
"O Estado Novo" fascista de Oliveira Salazar-Caetano, sostenía la perpetuidad del imperio portugués en Africa y Asia, lo que provocó en 1961 la expulsión de los portugueses de sus colonias de Goa, Diu y Damao por el ejército de India y el inicio de las guerras de liberación en Angola y en Guinea-Bissau.
En 1962, se fundó en Tanzania el Frente de Liberación de Mozambique (FRELIMO), que dos años más tarde inició las hostilidades contra el ejército colonial portugués, las que concluyeron en 1974, cuando el izquierdista MFA dispuso la independencia de las colonias.
Sin embargo, dos años más tarde, se desató la guerra civil entre la RENAMO -apoyada por la entonces Rodesia (actual Zimbabwe) segregacionista, Sudáfrica y la transnacional británica Lonhro- y el marxista Frente de Liberación de Mozambique (FRELIMO), a quienes el MFA había entregado el poder en 1975.
La guerra concluyo el 4 octubre de 1992, con el acuerdo de Paz de Roma que determinó la celebración de elecciones, realizadas el 27 de octubre de 1994. (FIN/IPS/mdq/ag/ip-if/96