ITALIA: Un paso hacia el euro, la futura moneda única europea

Italia dio un importante paso para alcanzar el tren que conducirá a un pequeño grupo de países a la Unión Monetaria Europea (UEM) cuando la lira reingresó al sistema continental de divisas, se congratularon hoy analistas económicos y políticos.

Los ministros de Finanzas y funcionarios bancocentralistas de los 15 países de la Unión Europea resolvieron este domingo en Bruselas el reingreso de la divisa italiana, la lira, al Sistema Monetario Europeo (SME) que dirigirá el timón hacia la tercera fase de la integración del continente.

Se trata de un paso fundamental hacia la instauración del euro, la futura moneda europea, pero aún insuficiente, aclararon de inmediato las autoridades de Alemania.

Los bancos alemanes expresaron su satisfacción, pero al mismo tiempo alertaron que la rehabilitación de la lira "no se debe entender como una luz verde" para la participación de Italia en la UEM desde el inicio del proceso, previsto para el 1 de enero de 1999.

El gobierno de Italia dispuso una política de austeridad para cumplir con los parámetros fijado para ingresar a la UEM.

Italia no cumple hasta ahora los dos requisitos fundamentales. Su déficit fiscal ascendió en 1995 a 6,7 por ciento del producto interno bruto (PIB), y no deberá superar el tres por ciento. La deuda pública, mientras tanto, representa 122 por ciento del PIB y no debería ser superior a 60 por ciento.

Los objetivos fijados en la ciudad holandesa de Maastricht en 1991 se deberán alcanzar en 1997. El control se reiterará el año siguiente, cuando se decidirá qué países ocuparán los primeros vagones del tren europeo hacia la integración monetaria.

Los analistas consideraban que apenas llegarían Francia, Alemania y los países bajos a la cita de 1999. Ahora, agregan en la lista, con ciertas dudas, a Italia, mientras ubican en un segundo grupo a Irlanda y Gran Bretaña, y, después, a España.

Italia abandonó el SME en 1992, lo cual le permitió a la lira una oscilación libre respecto de las otras monedas europeas, sujetas a una oscilación de 15 por ciento establecida por ese mecanismo. La medida favoreció a los exportadores italianos.

El mercado de valores, en el primer día de operaciones tras el regreso de la lira al SME, confirmó que la cotización establecida en Bruselas de 990 liras por marco, con una oscilación del 15 por ciento, se ajusta a la realidad.

La lira podrá registrar variaciones de entre 840 y 1.138 por cada marco, de acuerdo con lo dispuesto este domingo.

La moneda alemana se cotizó a 990,75 liras, cerca de 0,7 por ciento menos respecto de las 997,81 del día 22, el último día de operaciones antes de la reunión de ministros de Finanzas.

La oposición italiana reaccionó de forma negativa.

El presidente de la derechista Alianza Nacional (AN), Gianfranco Fini, dijo que el regreso de la lira al SME traduce "un fracaso político para el gobierno", porque su cotización "es demasiado baja y perjudicará las exportaciones".

El gobierno de Italia intentó que se fijara en Bruselas una cotización de 1.000 liras por marco.

El ministro del Tesoro, Carlo Azeglio Ciampi, quien encabezó las negociaciones en Bruselas, minimizó la diferencia entre las aspiraciones y lo obtenido. "Es una diferencia de apenas uno por ciento", dijo.

El jefe del gobierno de Italia, Romano Prodi, el resultado de las negociaciones "es una consecuencia de la seriedad de la política económica y de la estabilidad del país".

Prodi encabeza desde mayo el primer gobierno de centro izquierda de Italia de la coalición Olivo, integrada por el ex comunista Partido Democrático de Izquierda (PDS), los Verdes, ex democristianos y grupos laicos de centro.

El reingreso de la lira al SME constituye, según Prodi, un "paso fundamental para nuestra participación en la unión monetaria".

Pero el líder de la oposición, Silvio Berlusconi, sostuvo que la cotización establecida no constituye una "paridad favorable". La industria italiana "merecería un cotización superior, unos 1.050 liras por dólar", expresó.

El presidente de la patronal Confindustria, Giorgio Fossa, también expresó su preocupación. "Me parecía mas lógica a 1.010 liras por marco, según el promedio de los últimos seis meses", sostuvo.

Fossa señaló que el nivel fijado "recorta los espacios de competencia de nuestro país".

Por su parte, el secretario de la Confederación General de Trabajadores (CGIL), Sergio Cofferati, dijo que "las empresas dignas de este nombre no tienen nada que temer de la lira a 990 respecto del marco".

Se trató, a juicio del líder de la mayor organización sindical italiana, de un "compromiso aceptable para la grandisima parte del sistema productivo italiano". (FIN/IPS/jp/mj/if/96

Archivado en:

Compartir

Facebook
Twitter
LinkedIn

Este informe incluye imágenes de calidad que pueden ser bajadas e impresas. Copyright IPS, estas imágenes sólo pueden ser impresas junto con este informe