Un fiscal italiano pidió hoy el procesamiento penal del jefe del gobierno, Romano Prodi, a quien acusó de irregularidades en la privatización de una empresa cuando presidía el Instituto para la Reconstrucción Industrial (IRI)
Prodi habría incurrido en el delito de "concurso en tráfico de influencias", en la venta en 1993 de la empresa estatal de conservas Cirio-Bertolli-De Rica, según cree el fiscal adjunto de Roma, Giuseppe Geremia.
El IRI, creado en 1933 para financiar empresas en dificultades a causa de la crisis económica de esa época, jugó un papel determinante en la reconstrucción de Italia después de la segunda guerra mundial.
Geremia solicitó el procesamiento de las seis personas que integraban el consejo de administración del IRI cuando Cirio- Bertolli-De Rica fue cedida a la compañía financiera Fisvi.
Según el fiscal adjunto, Prodi y los restantes miembros del consejo de administración del IRI habrían procurado una "injusta ventaja patrimonial a la sociedad adquirente".
El juez encargado de las investigación preliminar del caso, Edoardo Landi, deberá decidir el procesamiento de Prodi, que desde el 18 de mayo encabeza un gobierno de centroizquierda, o archivar el asunto.
La coalición gobernante confirmó su confianza en Prodi. Mientras, Massimo Fini, presidente de Alianza Nacional, una de las dos principales fuerzas políticas de la oposición de centroderecha, solicitó al jefe del gobierno que "no minimice" el caso, aunque no pidió su renuncia.
Clemente Mastella, presidente del Centro Cristiano Democrático, surgido de la disolución de la Democracia Cristiana (DC) y también integrante de la coalición opositora, se pronunció contra la eventual petición de dimisión del jefe del gobierno.
La DC y el Partido Socialista desaparecieron en 1993, cuando sus principales dirigentes fueron procesados por corrupción en la campaña judicial denominada "Manos Limpias".
El diputado Marco Taradash, de Forza Italia, el mayor grupo de oposición, también se declaró contrario a pedir la renuncia de Prodi. Silvio Berlusconi, jefe de Foza Italia, enfrenta varias causas judiciales por supuesta corrupción.
Mientras, Prodi manifestó confianza en la justicia y se declaró dispuesto a dar todas las explicaciones necesarias.
La acusación del fiscal contra el jefe del gobierno provocó el retroceso en un punto de la Bolsa de Valores de Milán, la principal de Italia.
Así mismo, la moneda nacional perdió terreno frente al marco alemán, que de una cotización de 991 liras pasó a 994, y el dólar aumentó de 1.501 a 1.504 liras.
La noticia de la petición del procesamiento de Prodi se produjo al día siguiente de que la Unión Europea aceptara el regreso de la lira en el Sistema Monetario Europeo (SME), del cual había salido hace cuatro años a causa de una fuerte devaluación.
El SME regula la oscilación de las monedas europeas. (FIN/IPS/jp/ff/ip/96)