La población de Chiapas, el estado mexicano foco de la guerrilla zapatista, vive atemorizada por la presencia del ejército y empobrecida por una política económica que atenta contra su cultura y los derechos humanos, según el Consejo de la Paz, integrado por seis corrientes religiosas.
Reunidos en el sureño Chiapas, los delegados del Consejo exhortaron al gobierno de Ernesto Zedillo y al Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN) a evitar la "tentación" de la violencia y continuar dialogando para atender los problemas de la población indígena del estado.
Católicos, evangélicos, budistas, islámicos, hinduístas y cuáqueros procedentes de 10 países dialogaron entre lunes y viernes sobre los problemas de Chiapas, visitaron zonas indígenas, se reunieron con delegados del EZLN y realizaron actos religiosos conjuntos a favor de la paz.
La cultura de "los hombres y mujeres de Chiapas que escogieron el camino de la paz" puede ser destruida "si el mundo no ayuda y presta atención" a sus problemas, advirtió el Consejo de la Paz en su declaración final.
"El mundo debe reflexionar sobre Chiapas y preocuparse", señaló el Consejo.
Los firmantes de la declaración destacaron el temor de los habitantes de Chiapas ante la militarización y la actividad de cuerpos armados irregulares que trabajan para hacendados y autoridades.
También expresaron que observan "con preocupación" el impacto en la población indígena "de una política económica que atenta contra su cultura y no respeta sus derechos humanos".
"El neoliberalismo impuesto por los países desarrollados ha hecho que la población de América Latina pierda la esperanza y se encuentre atemorizada", indica el documento final.
Al declarar terminado el encuentro, el obispo de Chiapas, Samuel Ruiz, uno de los mediadores en las negociación entre el gobierno y el EZLN, sostuvo que la cita mostró que las diferencias religiosas "no son un obstáculo sino una motivación" para continuar el proceso de paz.
Aunque en el programa de la cita se contemplaban reuniones del Consejo de la Paz con delegados del gobierno y militares, éstas no pudieron realizarse. Según los organizadores, a último momento las autoridades suspendieron los encuentros. (FIN/IPS/dc/ff/ip hd/96