Las organizaciones no gubernamentales (ONG) afirmaron que la seguridad alimentaria es un derecho de todos los hombres y mujeres y un objetivo posible, y reclamaron "una tierra para vivir", en un encuentro realizado en la capital italiana en coincidencia con la Cumbre de la Alimentación.
"Queremos una tierra para vivir", proclamaron en una consigna escrita en castellano en una declaración aprobada por el Comité Internacional del Forum de las ONG.
Una vez que sea ratificado por los 3.000 delegados de unas 1.500 ONG de todo el mundo, el documento será presentado a la Cumbre Mundial de la Alimentación que se inauguró este miércoles en la sede de la Organización de Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO).
El texto sostiene que garantizar el derecho a la seguridad alimentaria, que proclaman la Declaración de Roma y el Plan de Acción que aprobó por aclamación la Cumbre, es "la primera responsabilidad de los gobiernos, pero también de la sociedad civil".
Titulado "Ganancias para pocos o alimentos para todos", la declaración de esta Cumbre paralela, que se inauguró el lunes y se clausurará el domingo, al igual que la de la FAO, formula sus propuestas para eliminar el hambre.
Según la FAO, en la actualidad hay 840 millones de personas que padecen hambre, y el propósito es reducir ese número a la mitad antes del 2015.
Las ONG proponen un nuevo modelo de organización dirigido a una descentralización económica y política e indica algunas estrategias, como reforzar las políticas en favor de los pequeños productores, incluidos los pueblos indígenas, las mujeres y los jóvenes.
Plantean la necesidad de evitar la concentración de riquezas y de poder y señala que se debe llevar a cabo una reforma agraria en favor de la gente pobre y que se debe prohibir la expropiación de las tierras.
Expresa que se debe evitar en la producción agrícola los efectos negativos para el ambiente y respetar por el contrario las reglas ecológicas.
El documento sostiene el derecho de los seres humanos a acceder a los alimentos y al agua, "elementos que no pueden ser usados como arma política".
Identifica en las guerras y en el actual mercado internacional, que concentra riqueza y poder, algunas de las causas que llevan al hambre y a la inseguridad alimentaria.
El documento critica también las políticas del Fondo Monetario Internacional (FMI) y del Banco Mundial por considerar que penalizan a los pequeños agricultores.
Considera que los gobiernos son los primeros responsables de la seguridad alimentaria y que para esto deben adoptar instrumentos dirigidos a derrotar la pobreza y a resolver los conflictos.
Por su parte, la sociedad civil debe controlar las políticas nacionales, y reconocer a las mujeres un papel central.
El nuevo modelo propuesto en el documento de las ONG plantea que las leyes internacionales deben traducir en normas los derechos sobre la seguridad alimentaria.
El Forum de las ONG concluirá sus sesiones de la semana con la elaboración de un "código de comportamiento" y una "convención global sobre la seguridad alimentaria". (FIN/IPS/jp/jc/ip/96