El mercado financiero mexicano desnuda fragilidades y se tambalea golpeado por múltiples frentes, mientras algunos empresarios advierten sobre el peligro de un nuevo colapso y el gobierno pide calma.
El país está "en al filo de la navaja", señaló Juan Sánchez, líder del Consejo Mexicano de Hombres de Negocios, al referirse a la ola especulativa que viene afectando a los mercados desde la segunda semana de octubre.
Este jueves el dólar llegó a una cotización de 8,15 pesos, ocho por ciento superior a la de incios de mes y la más alta del año, en tanto que la Bolsa de Valores continuó su tendencia descendente.
México enfrenta una etapa de nerviosismo que pone en duda no sólo las afirmaciones oficiales sobre la estabilidad recobrada sino las mismas cifras macroeconómicas que hablan de recuperación, expresó el opositor Partido de la Revolución Democrática (PRD).
Según el secretario de Hacienda Guillermo Ortiz, lo últimos movimientos financieros son "normales" y debe prevalacer la tranquilidad. El mercado de divisas vive reajustes luego de una etapa de estancamiento, sostuvo.
La postura oficial fue respaldada por el Consejo de las Américas, poderoso grupo empresarial estadounidense cuyos representantes visitaron esta semana al presidente Ernesto Zedillo.
México maneja sus problemas con determinación y exhibe "impresionantes cifras de crecimiento", dijo a nombre del Consejo David Rockefeller.
Los analistas atribuyen la inestabilidad de las últimas semanas, que elevó las tasas de interés más de dos puntos, a problemas como los ataques del Ejército Popular Revolucionario (EPR) y las discusiones sobre la reforma electoral entre el gobierno y los partidos.
El grupo guerrillero causó esta semana cuatro bajas al Ejército Federal,
También se imputa el nerviosismo al cambio de estrategia en la privatización de las petroquímicas, decidido por el gobierno luego de presiones del partido oficialista, que se opuso a la venta total de los activos de las plantas, y al retraso en poner en marcha el sistema de pensiones privadas.
No faltó quien achacó los problemas al proceso electoral en el vecino Estados Unidos.
Si el gobierno del presidente Zedillo no responde a las exigencias de cambio político se volverán a registrar "de manera sistemática las crisis que agobian" al país y se conocerá "una situación extremadamente grave en el futuro", advirtió Sánchez, considerado el ideólogo del empresariado nacional.
"Hemos tenido crisis económicas muchísimo peores que la actual, su base es la situación política", opinó.
El gobierno afirmó que tras el pacto económico suscrito el pasado fin de semana con los gremios de empresarios, sindicatos y campesinos, en el que concertó alzas en los salarios e incrementos en los costos de varios servicios públicos, la tranquilidad volvería a los mercados, pero no sucedió.
Además de la fragilidad que muestran la moneda y la Bolsa de Valores, las últimos días se observó en los mercados incrementos a los productos de la canasta básica de consumo, lo que causó molestias entre los consumidores, bombardeados por declaraciones oficiales en las que se asegura que la recuperación ya llegó.
Baja progresiva de la inflación y desempleo, llegada de capitales extranjeros no especulativos y reactivación del producto inteno bruto son parte del nuevo escenario estadístico promocionado por las autoridades, tras superar lo peor de la crisis estallada a fines de 1994.
El colapso podría regresar, pues la economía sigue enfrentando continuos sobresaltos ante cualquier expresión dubitativa del gobierno en los frentes financieros o políticos, advirtió el analista Ramón Pieza.
Tras mantener por varios meses la promesa de vender la mayoría de activos y acciones de las plantas petroquímicas, este mes el gobierno anunció que sólo se desprendería del 49 por ciento.
En el caso de la privatización de los ferrocarriles la primera convocatoria fracasó por los escasos participantes y las bajas ofertas, mientras en el sistema de pensiones privadas, que debía entrar a operar en el primer trimestre de 1997, el gobierno cambió de plan y pospuso por seis meses más su funcionamiento.
En el frente político la última semana las autoridades fueron presionadas ante la falta de acuerdo para integrar el nuevo Instituto Federal Electoral. Finalmente se logró concertar la integración del organismo, no sin antes escucharse advertencias y duras críticas de la oposición.
La economía y el peso se estabilizarán en la medida que se solucionen los asuntos políticos y se afiance la democracia, sentenció el líder del Consejo Mexicano de Hombres de Negocios. (FIN/IPS/dc/dg/if-ip/96)
