Acosados por problemas financieros, que persisten a pesar de millonarios apoyos oficiales, los bancos mexicanos alejan los peligros de quiebra abriendo sus puertas a los capitales extranjeros.
Se trata de un proceso que habría sido impensable antes de la crisis de fines de 1994, cuando los banqueros exhibían altos rendimientos, ofrecían préstamos sin mayores problemas y se felicitaban por la privatización del sistema, realizada entre los años 80 y 90.
Según las previsiones, para 1997 los extranjeros poseerán entre 16 y 100 por ciento de las acciones de 12 de las 18 instituciones locales existentes.
Este jueves, el banco Santander de España informó que adquirió 75 por ciento de las acciones del grupo financiero Inverméxico, intervenido por el Estado y con una elevada cartera vencida.
Tras el estallido de la crisis, el gobierno del presidente Ernesto Zedillo debió gastar más de 20.000 millones de dólares para salvar a la banca del colapso, es decir alrededor de 12 por cienüZCZC IPS135 MVD056 BB XA EE XJ XX QU SERVESP .DEVAMVD LA IF MEXICO: Capital foráneo, otro salvavidas para los bancos
por Diego Cevallos
MEXICO, 24 oct (IPS) Acosados por problemas financieros, que persisten a pesar de millonarios apoyos oficiales, los bancos mexicanos alejan los peligros de quiebra abriendo sus puertas a los capitales extranjeros.
Se trata de un proceso que habría sido impensable antes de la crisis de fines de 1994, cuando los banqueros exhibían altos rendimientos, ofrecían préstamos sin mayores problemas y se felicitaban por la privatización del sistema, realizada entre los años 80 y 90.
Según las previsiones, para 1997 los extranjeros poseerán entre 16 y 100 por ciento de las acciones de 12 de las 18 instituciones locales existentes.
Este jueves, el banco Santander de España informó que adquirió 75 por ciento de las acciones del grupo financiero Inverméxico, intervenido por el Estado y con una elevada cartera vencida.
Tras el estallido de la crisis, el gobierno del presidente Ernesto Zedillo debió gastar más de 20.000 millones de dólares para salvar a la banca del colapso, es decir alrededor de 12 por ciento de su producto interno bruto de 1995, según afirma la calificadora internacional Standar & Poor.
Si los bancos que están en proceso de capitalización y consolidación operativa no encuentran pronto un socio extranjero el gobierno se los buscará, indicó Eduardo Carrillo, presidente del grupo financiero Promex-Finamex.
En los últimos dos años, los bancos españoles Bilbao-Vizcaya, Central Hispano y Santander, los canadieneses Nueva Escocia y Monteral, y el portugués Comercial adquirieron entre 10 y 75 por ciento de los paquetes accionarios de seis instituciones mexicanas.
El analista Enrique Quintana señala que el gobierno desea la presencia extranjera para recuperar algo de la ayuda entregada a la banca y alejar las amenazas de quiebra.
También para apurar la modernización del sistema, que tendría un importante retraso respecto a Estados Unidos y Canadá, socios de México en el Tratado de Libre Comercio de América del Norte.
"Venimos a México a posicionar una nueva cultura europea y nuevos esquemas de hacer banca, pues el mercado lo amerita", señaló Emilio de Ybarra, presidente del grupo Bilbao-Vizcaya.
Para la Asociación Nacional de Tarjetahabientes, la "ineficiente banca mexicana vive un franco proceso de extranjerización".
El sistema financiero es una contradicción, pues mientras los bancos están a punto de quebrar y sus clientes sufren por no poder pagar "los banqueros y sus socios están en plena bonanza", sostuvo el portavoz de la Asociación Francisco Castro.
El gobierno anunció en los últimos 22 meses programas de apoyo a bancos comerciales y a deudores de tarjetas de crédito, hipotecarios, al fisco y del sector agropecuario, con el respaldo financiero y asesoramiento de organismos como en Banco Mundial.
La banca mexicana entró en crisis tras los problemas económicos de fines de 1994, que se tradujeron en elevación de las tasas de interés, depreciación de los salarios, mayor inflación e incremento en los índices de morosidad.
De acuerdo a cifras oficiales, la cartera vencida de los bancos pasó de 5.000 a 15.600 millones de dólares entre 1994 y 1995.
Los socios extranjeros de los bancos locales esperan empezar a recuperar sus inversiones en 1997 gracias al repunte de la economía nacional y al manejo de los fondos de retiro.
El próximo año comenzarán a circular en el mercado unos 3.400 millones de dólares que corresponden a las contribuciones de retiro de los trabajadores, luego de que se reformaron leyes que dirigían ese dinero exclusivamente al Instituto estatal del Seguro Social.
"La banca extranjera llegará hasta donde el mercado lo permita y esperamos que sea muy lejos", expresó el presidente del grupo Bilbao-Vizcaya.
Además de los nuevos socios extranjeros de la banca nacional, operan en México instituciones de capital cien por ciento foráneo, cuya actividad se limita a realizar negocios a gran escala con empresas importadoras y exportadoras.
En ese rubro se encuentran bancos de Estados Unidos, Francia y Japón. (FIN/IPS/dc/dg/if/96)
