La Unión Europea (UE) designó un "enviado especial" para Medio Oriente, en un nuevo mensaje a la comunidad internacional sobre su deseo de una mayor participación en esa turbulenta región.
Los cancilleres de la UE nombraron al diplomático español Miguel Angel Moratinos como su representante en Medio Oriente, días después de que el presidente francés Jacques Chirac, en visita a la región, expresara el deseo de Europa de tener un papel más importante en el proceso de paz.
La designación, realizada en un encuentro de cancilleres celebrado en Luxemburgo este lunes y martes, refleja también la creciente preocupación de la UE por la falta de progreso en la pacificación de Medio Oriente, destacaron funcionarios.
"Se trata de una decisión muy importante", dijo a los periodistas el canciller francés Hervé de Charette. "El enviado representará a la UE e iniciará contactos útiles para facilitar la paz", añadió.
Se prevé que Moratinos, actual embajador deEspaña ante Israel, asumirá su nueva función inmediatamente. Antes de ser enviado a Israel, Moratinos ayudó al ex canciller español Xavier Solana a organizar la primera conferencia Euro-Mediterránea, que hace un año reunió en Barcelona a cancilleres de la UE y 12 países del sur del Mediterráneo.
Moratinos "hará contactos, iniciará un diálogo, realizará propuestas y lanzará iniciativas" para mantener en su camino el proceso de paz, destacó De Charette.
Sin embargo, su principal objetivo consistirá en elevar el perfil político de Europa en Medio Oriente, ya que la mayoría de los gobiernos de la UE están cada vez más frustrados por ser tratados como actores políticos de segunda categoría.
Diplomáticos europeos opinaron que el bloque, como la fuente más importante de ayuda financiera a Medio Oriente, debería ser tratado con más respeto.
No obstante, los 15 países miembros discrepan sobre la forma de marcar su presencia. En las últimas semanas, se produjeron disputas privadas entre gobiernos europeos sobre quién debería representar al bloque y su exacta misión política.
Francia, fiel a su creencia de que Europa debe jugar un papel tan importante como Estados Unidos, prefería nombrar un político de alto perfil, capaz de inspirar respeto en la región. Los nombres del ex primer ministro español Felipe González y el ex presidente de la Comisión Europea, Jacques Delors, fueron mencionados.
Pero otros países europeos, temiendo entrometerse en lo que se observa como un esfuerzo de paz negociado por Estados Unidos, argumentaron que era necesario un diplomático de carrera y no un político para asumir el papel de mediador entre Europa y la región.
Los argumentos de Francia no prosperaron, y el mandato de Moratinos consistirá en "establecer contactos con negociadores de Medio Oriente, realizar recomendaciones al Consejo de Ministros de la UE y observar de cerca las conversaciones de paz".
El representante "se acercará a las negociaciones de paz tanto como sea posible, pero sin tener un lugar en la mesa", aclaró un funcionario irlandés.
Francia, sin embargo, cree que la UE debe continuar presionando para obtener plena participación en las negociaciones. "Debemos ser copatrocinadores del proceso de paz, ya que lo que ocurre en Medio Oriente nos afecta directamente", destacó De Charette.
El canciller francés advirtió que su país no tiene intenciones de renunciar a su interés y participación en Medio Oriente. Esa región "es de esencial interés para nosotros", insistió. (FIN/IPS/tra-en/si/fn/ml/ip/96