Israel continuará reivindicando Jerusalén como su capital, y negará ese derecho a las demás naciones, dijo hoy ante la Asamblea General de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) el canciller israelí, David Levy.
Un día después que Levy y el primer ministro israelí, Binyamin Netanyahu, mantuvieran en Washington una reunión inconclusa patrocinada por Estados Unidos con el presidente palestino, Yasser Arafat, el canciller destacó el deseo de su gobierno de no modificar el estatuto de Jerusalén.
"Capital de Israel en tiempos antiguos y modernos, (..) Jerusalén nunca ha sido la capital de ningún otro país", dijo Levy, en referencia a reclamos palestinos según los cuales la ciudad deberá ser capital de su proyectado Estado.
Las resoluciones de la ONU no reconocen las afirmaciones de Israel de que Jerusalén es su capital, y los acuerdos de paz entre israelíes y palestinos dejaron el estatuto de la ciudad sujeto a negociaciones futuras.
Pero las negociaciones sobre Jerusalén, siempre catalogadas de innecesarias, ahora son consideradas urgentes, tras la violencia de la semana pasada en Cisjordania y la franja de Gaza, en que murieron más de 70 personas.
Los enfrentamientos entre israelíes y palestinos comenzaron después que el nuevo gobierno derechista de Netanyahu abriera un segundo túnel bajo la mezquita de Al-Aqsa, sitio sagrado musulmán en Jerusalén.
Israel se ha negado a cerrar el túnel, y a cumplir con aspectos clave de los acuerdos de paz, incluyendo el retiro atrasado de tropas israelíes de la ciudad cisjordana de Hebrón.
Esos atrasos provocaron críticas a la política israelí en las últimas semanas, incluyendo una resolución del Consejo de Seguridad del sábado, la cual hizo un llamado a revertir las medidas recientes.
Los vecinos de Israel también han manifestado su incomodidad en Nueva York. "Urgimos al gobierno de Israel a revisar su decisión (sobre la apertura del túnel), para evitar cualquier acción que pueda ser construida como provocación y el uso de la fuerza", dijo esta semana la canciller de Turquía, Tansu Ciller.
Otros urgieron a Israel a evitar las provocaciones en Jerusalén. "El gobierno de Israel ha intentado una vez más alterar la composición demográfica y geográfica de Jerusalén. Esto debe ser resuelto mediante negociaciones", dijo la semana pasada el canciller de Egipto, Amr Moussa.
La principal preocupación de los críticos de Netanyahu es que Israel parte del camino trazado por el proceso iniciado cuando el gobierno laborista del fallecido primer ministro, Yitzhak Rabin, y Arafat acordaron principios básicos para la paz en 1993.
Pero Levy dijo a la Asamblea General que el gobierno de la coalición de derecha que en mayo derrotó al sucesor de Rabin, Shimon Peres, está comprometido con el mismo proceso.
"En nuestro país no existen diferencias entre quienes buscan la paz y quienes la rechazan. Israelíes de izquierda y derecha (…) convergen en su búsqueda de la paz", dijo el canciller, y afirmó que las recientes conversaciones "trataron sobre la sustancia y los contenidos de la paz".
Levy añadió que su gobierno "admite sinceramente la declaración del presidente (Bill) Clinton que forma la base de nuestra asociación para la paz: negociaciones directas en una atmósfera constructiva".
Negociadores israelíes y palestinos se reunirán el domingo en el puesto fronterizo de Erez, en Gaza, para continuar negociaciones sobre cómo implementar los acuerdos de paz de Oslo, dijo Levy.
Pero su optimismo sobre el reciente diálogo de paz en Washington fue rechazado por las reacciones de palestinos, incluyendo Arafat, quien se mostró visiblemente molesto tras el cierre de la cumbre del miércoles, y abruptamente canceló una conferencia de prensa para dejar la ciudad.
"El proceso de paz está al borde del colapso", dijo tras la cumbre Mustafa Natsheh, alcalde de Hebron.
Incluso Clinton, ansioso por evitar una confrontación sobre política exterior en vísperas de las elecciones presidenciales en Estados Unidos, se refirió a la promesa de la campaña electoral de Netanyahu de "no habrá paz sin seguridad" en su exhortación a compromisos concretos para promover el proceso de paz.
"Así como no puede haber paz sin seguridad, no puede haber verdadera seguridad sin paz", dijo Clinton este miércoles. (FIN/IPS/tra-en/fah/yjc/lp/ip/96