Unos 300 civiles hondureños armados que operan en la frontera con El Salvador serán incorporados a la policía en tareas de combate a la delincuencia, anunció hoy el presidente Carlos Reina.
El mandatario negó que la organización, llamada Comité de Seguridad y Defensa de la Soberanía Nacional "Cerquín", sea un movimiento similar a los zapatistas del estado mexicano de Chiapas, como lo habían afirmado medios de prensa locales.
"Todo hace indicar que se trata de un grupo de civiles que optaron por tomar las armas para labores de autodedefensa en la zona fronteriza con El Salvador y nuestro deber es dialogar con ellos e incorporarlos a la labores policiales de seguridad y defensa de las personas y sus bienes", dijo.
Las Fuerzas Armadas enviaron esta semana un contingente para tomar contacto con el Comité "Cerquín", cuya presencia fue descubierta esta semana por el periódico La Prensa.
Los miembros del Comité indicaron que actuán desde hace seis meses para paliar la ausencia de personal militar y policial en la zona de Colomoncagua, fronteriza a El Salvador, al tiempo que pidieron obras de infraestructura, centros de salud y escuelas.
El canciller Delmer Urbizo afirmó que el gobierno no acepta grupos de civiles armados en el territorio y que dialogará con el El Salvador para realizar acciones conjuntas con el fin de garantizar la seguridad y la vida de las personas en esas zonas.
La próxima semana se integrará una comisión de seguimiento para avanzar en la ejecución del fallo de la Corte Internacional de Justicia que delimitó, en 1992, la frontera terrestre y marítima entre ambos países.
Honduras y El Salvador libraron una guerra en 1969 por problemas de población y fronteras, pero en 1980 firmaron un tratado de paz y acudieron conjuntamente ante el tribunal mundial.
La Corte otorgó más de 300 de los 424 kilómetros en seis zonas en disputa y más de 10.000 salvadoreños quedaron en la parte asignada a Honduras mientras un millar de hondureños pasaron a vivir en El Salvador.
El Comité Cerquín se queja de frecuentes incursiones de bandas armadas procedentes de El Salvador en territorio hondureño, que han robado, quemado viviendas y violado mujeres.
La Comisión de Defensa de los Derechos Humanos de Centroamérica advirtió el martes en Costa Rica que los roces entre Honduras y El Salvador en la zona fronteriza podrían generar un nuevo conflicto armado.
"Hay una buena relación con gobierno de El Salvador y la disposición de ejecutar el fallo de la Corte Internacional y no volver a un episodio vergonzoso como es un enfrentamiento armado", dijo Reina. (FIN/IPS/jrd/dg/ip/96
