La guerrillera Unidad Revolucionaria Nacional Guatemalteca (URNG) no dio aún respuesta a la denuncia del gobierno, que la acusó de participar en un secuestro y provocar de ese modo la suspensión del diálogo de paz.
El gobierno decidió en la tarde del lunes interrumpir las negociaciones de paz con la URNG, comenzadas en 1991 y cuyo desenlace se aguardaba para diciembre, hasta que los guerrilleros aclaren su intervención en el secuestro de Olga Novella, una millonaria de 86 años.
Novella fue secuestrada el 25 de agosto y canjeada el 20 de este mes por el guerrillero Rafael Valdizón, conocido como "comandante Isaías.
Valdizón, a quién la Inteligencia Militar seguía la pista como sospechoso, fue capturado el día 19, y propuso el canje tras reconocer que guerrilleros bajo su mando mantenían cautiva a Novella, de acuerdo con la versión oficial.
Las autoridades aceptaron el ofrecimiento de Valdizón "por razones humanitarias y ante el creciente riesgo de muerte para la secuestrada, logrando de esta manera su libertad" dijo el Ministro de Gobernación, Rodolfo Mendoza.
El gobierno considera a Valdizón alto dirigente de la Organización del Pueblo en Armas (ORPA), cuyo líder es Rodrigo Asturias, alias Gaspar Ilom, uno de los cuatro jefes de la URNG.
Según funcionarios de gobierno, las fuerzas de seguridad hallaron en poder de Valdizón documentos internos de la URNG vinculados al proceso de paz y una carta manuscrita de Novella dirigida a su familia.
Las fuentes agregaron que la negociación del canje fue mantenida en reserva para evitar riesgos a la secuestrada, pero las autoridades solicitaron al moderador de la Organización de Naciones Unidas en el diálogo de paz, el francés Jean Arnault, que exigiera una explicación del hecho a la URNG.
Varios medios de prensa intentaron comunicarse el lunes con el mando de la URNG en México, donde esta martes debían continuar el diálogo de paz, aunque no obtuvieron respuesta.
"El gobierno considera que el involucramiento de la ORPA en este secuestro tiene graves repercusiones en el desarrollo de las conversaciones de paz y lo que ello supone para el interés del pueblo guatemalteco", declaró Mendoza.
La premio Nobel de la Paz Rigoberta Menchú señaló que "en estos momentos nos queda pedirle a la URNG una explicación amplia y, si tuvo alguna responsabilidad en el secuestro del que se le acusa, invocamos a la justicia para así aplacar la impunidad".
Menchú dijo que el proceso de paz no debe ser puesto en riesgo. "Los guatemaltecos estamos obligados a salvarlo y exigir que se aclaren los hechos, pues queremos saber la verdad".
Antonio Mobil, diputado del izquierdista Frente Democrático Nueva Guatemala, indicó que aguarda de la URNG una explicación de lo sucedido. "Ojalá que todo sea falso y no tenga la connotación que el gobierno le quiere dar", dijo.
"Denunciamos que la URNG tomaba poblados y no nos hacían caso. Es necesario que el pueblo sepa con quiénes se estaba hablando. Mientras se acordaba el cese de hostilidades, ellos estaban secuestrando", expresó por su parte el diputado Arístides Crespo, del derechista Frente Republicano Guatemalteco,
La Misión de Naciones Unidas para la Verificación de los Derechos Humanos en Guatemala (MINUGUA) advirtió el lunes de noche que la guerrilla ha violado gravemente su compromiso de respetar los derechos humanos.
El MINUGUA respaldó la información oficial sobre el secuestro y deploró la situación creada. A su juicio, los guerrilleros violaron el compromiso de evitar sufrimientos a la población civil mientras se negocia el acuerdo final de paz.
Gustavo Porras, coordinador de la gubernamental Comisión de Paz, que dialoga con la URNG, manifestó que no es conveniente especular sobre el futuro de la firma de la paz, pues debe esperarse la respuesta del comando insurgente.
Pero el sociólogo Héctor Rosada, ex coordinador de la Comisión de Paz, observó "cabos sueltos" en la versión oficial de los hechos y criticó al gobierno y a la guerrilla.
Rosada se preguntó por qué se informa con ocho días de retraso del canje de Valdizón por Novella, y cuando sólo faltaba un día para la reanudación de las conversaciones de paz en México. El gobierno y los delegados de la UNRG debían discutir en México la reinserción de los guerrilleros en la sociedad.
Así mismo, consideró "una tremenda casualidad, muy favorable para el gobierno, que un comandante guerrillero personalmente se presente a cobrar un rescate portando documentación que lo compromete"
En tercer término, Rosada se preguntó quién autorizó el canje del dirigente guerrillero por la anciana secuestrada, y por qué Valdizón no fue presentado ante la justicia inmediatamente después de ser capturado.
En su opinión, son demasiados cabos sueltos, que deberán aclararse.
El sociólogo también se preguntó por qué las fuerzas qyue detuvieron a Valdizón no dieron cuenta del hecho a la MINUGUA para garantizar su seguridad física y anticiparse a eventuales denuncias de malos tratos o intimidación. (FIN/IPS/cz/ff/ip/96