Dos pesados del negocio de las fotografías, la estadounidense Kodak y la japonesa Fuji, compartirán cartelera con la afamada ley Helms-Burton en una jornada espectacular, el día 16, ante el tribunal que dirime controversias comerciales en el mundo.
En el mismo día, el órgano de solución de diferencias de la Organización Mundial de Comercio (OMC) deberá dictaminar sobre dos conflictos mercantiles y políticos que conmueven a la opinión internacional.
Los gigantes de la película y el papel fotográficos, Eastman Kodak Co. y Fuji Photo Film Co., respaldados por los gobiernos de Washington y Tokio, disputan el control del mercado japonés.
A su vez, la Unión Europea (UE) insistirá, probablemente el mismo día, para que la OMC se pronuncie sobre la legitimidad de la ley Helms-Burton, dictada por Estados Unidos en su campaña por aislar a Cuba.
En el caso de los insumos fotográficos, las autoridades estadounidenses sostienen que en Japón rigen desde hace tres decenios medidas que impiden la importación de los dos productos.
A través de distintas decisiones, el gobierno de Japón estableció un sistema de distribución por el cual ningún fabricante extranjero puede obtener acceso significativo al mercado local, afirmó este jueves el diplomático estadounidense Andrew Shoyer.
La Kodak y la Fujifilm controlan alrededor de 70 por ciento del mercado mundial de película y papel de fotos.
Pero la compañía estadounidense protesta porque en Japón ha sido relegada a una porción menor del mercado, de apenas 10 por ciento.
La tajada más grande del negocio en Japón se la lleva Fuji, con 70 por ciento, mientras 20 por ciento se lo reparten competidoras menores.
Curiosamente, en Estados Unidos se reproduce una distribución inversa, con 70 por ciento de las ventas para la nacional Kodak y 10 por ciento para Fuji.
La denuncia estadounidense indicó que además de bloquear el acceso de la competencia a los canales de distribución primarios, el gobierno de Japón se las ingenió para impedir que los fabricantes extranjeros accedieran a traves de canales alternativos.
Washington presentó la denuncia en julio cuando solicitó que la OMC convocara a consultas para un arreglo entre las partes.
Transcurridos los plazos previstos por los procedimientos de la OMC, Estados Unidos pidió este jueves el establecimiento de un grupo especial (panel) para que se pronuncie sobre el diferendo.
Pero el embajador japonés, Nobutoshi Akao, replicó que su gobierno no podía aceptar en la fecha el establecimiento del panel.
Las normas de la OMC determinan que la oposición de una de las partes aplaza hasta la sesión siguiente, el día 16, la decisión, en este caso automática, de integrar el panel.
Akao alegó que Estados Unidos no había aclarado durante las consultas cuáles eran las medidas específicas que violaban las normas internacionales de comercio.
Shoyer lamentó "la decisión de Japón de aplazar la constitución del panel" y reclamó una resolución lo antes posible.
La disputa entre Kodak y Fuji quedó postergada hasta el día 16, cuando volverá a reunirse el Organo de Solución de Diferencias (OSD) de la OMC.
En la misma fecha, la Unión Europea presentará probablemente su solicitud de un panel para que se pronuncie sobre la ley Helms- Burton que acentúa el embargo comercial estadounidense contra Cuba y prevé sanciones para los inversores extranjeros en el país caribeño.
El Consejo de Ministros de Relaciones Exteriores de la UE decidió esta semana en Luxemburgo avanzar en las gestiones que ya había iniciado para obtener la mediación de la OMC en el caso de la ley Helms-Burton.
En la sesión del día 16, Estados Unidos puede oponerse al establecimiento de un grupo especial para examinar la queja de los europeos, con lo cual postergará la creación del organismo hasta la sesión siguiente.
La medida de Washington, que contempla represalias contra los inversionistas que exploten propiedades confiscadas en Cuba, ha sido objetada por gobiernos y organismos regionales, incluidos los de América Latina. (FIN/IPS/pc/dg/if/96