El secretario de Agricultura de Brasilia, Joao Luiz Homem de Carvalho, expondrá los logros del Programa de Verticalización de la Pequeña Producción (Prove) en el 17 Salón Internacional del Alimento, que comenzará hoy en París.
Homem de Carvalho explicará el lunes 21 el desarrollo de este programa del gobierno del distrito federal brasilero, que ya brindó asistencia en materia de créditos, tecnología e imagen empresarial a 56 agroindustrias familiares.
El Prove también contribuye en las ventas de los productos de esas empresas, en los pabellones instalados en la red de supermercados de la Sociedad de Abastecimiento de Brasilia, que depende del gobierno de la ciudad.
Los agricultores y sus familias trabajan en pequeñas fábricas obtenidas a través del Prove en la clasificación de huevos, la cría de pollos, la producción de dulces y lácteos y harina de mandioca, por ejemplo.
Estos locales son construidos con planchas de cemento de rápido montaje que les vende la Fundación Zoobotánica a precios accesibles.
El Salón de París "será una oportunidad para difundir los logros del Prove y hacer contactos", dijo Homem de Carvalho.
Esta será la primera vez que el distrito federal estará presente en la muestra, a la cual acudirán unos 4.000 expositores. Se estima que 72 por ciento de la concurrencia se constituye de funcionarios de gobiernos y empresarios.
Homem de Carvalho definió el Prove como una solución creativa para mejorar la calidad de vida de pequeños agricultores hasta ahora excluidos del proceso productivo.
"Desarrollar el Prove nos posibilitó democratizar las oportunidades, así como generar renta y empleos, sin paternalismos", sostuvo.
El funcionario estimó que este tipo de programas puede ampliarse para beneficiar a unos 22 millones de brasileños que sufren la exclusión social en áreas rurales.
El gobernador de Brasilia, Cristovam Buarque, sostuvo que la generación de empresas agroindustriales familiares "es una solución definitiva y permanente a la exclusión social (que resulta) de la globalización económica".
"Un productor aislado tiene menos posibilidades de penetrar en el mercado de los grandes centros comerciales", explicó Buarque.
El Prove aporta al propietario de la empresa agroindustrial entrenamiento, orientaciones y educación en materia de tecnología de procesamiento de alimentos, calendarios de producción, higiene, salud, control de calidad y estrategias de permanencia en el mercado.
Las pequeñas fábricas son dejadas al arbitrio de sus dueños después de que los expertos del programa atendieron integralmente los criterios y normas ambientales, de higiene, arquitectónicas, de seguridad, laborales e impositivas.
El Prove, creado en octubre de 1995, censó medio millar de productores y abrió camino a la construcción de muchas agroindustrias, de las cuales 56 están en pleno funcionamiento.
Muchos de los productos de esas empresas son consumidos fuera del área de Brasilia, como hortalizas, huevos de gallina y codorniz, carne de pollo y cerdo, maíz y soja.
La meta del Prove es generar, antes de 1999, 7.400 empleos en el área rural de Brasilia, 2.400 de ellos directos, a través de la creación de 300 pequeñas industrias. (FIN/IPS/dv/96