La tan esperada reunión entre el primer ministro de Israel, Binyamin Netanyahu, y el presidente de la Autoridad Nacional Palestina, Yasser Arafat, efectuada hoy en Erez, podría haber roto el hielo para abordar la cuestión más delicada: el retiro israelí de la ciudad cisjordana de Hebrón.
El tema de Hebrón no fue discutido en el encuentro de una hora y media que ambos líderes mantuvieron en el puesto militar de Erez, que separa Gaza de Israel. La entrevista fue en sí misma un asunto tan sensible, que delegados de ambas partes negociaron previamente hasta el momento y la forma del apretón de manos.
En declaraciones posteriores a la reunión, Netanyahu se limitó a decir que el retiro de los soldados israelíes del centro de Hebrón será estudiado en el comité de seguimiento de los acuerdos de paz vigentes entre ambas partes.
"Descutiremos la cuestión en el comité de seguimiento", dijo el primer ministro en conferencia de prensa. "Debemos poner atención a los aspectos de la seguridad. Si se rompe la seguridad, se rompe el proceso de paz".
El asunto, sin embargo, es la prueba fundamental para comprobar la voluntad israelí de cumplir los términos del acuerdo que firmó el anterior gobierno laborista con Arafat. También es el banco de pruebas de la firmeza del líder palestino a la hora de exigir el cumplimiento de lo firmado.
"Israel debe hacer lo que ha acordado hacer", declaró a IPS el alcalde de Hebrón, Mustafá Natshe, después de la reunión. "Esperamos ser testigos del retiro de los soldados israelíes".
Por el contrario, el portavoz de los colonos israelíes en Hebrón, David Wilder, declaró que "cualquier ejército extranjero diferente del israelí será peligroso. Hebrón es una ciudad judía y siempre lo será".
El encuentro Netanyahu-Arafat se produjo después de 10 semanas de tensas relaciones mutuas, durante las cuales el primer ministro se mostró renuente a la entrevista.
En pancartas portadas por militantes de la organización "Paz Ahora", que se manifestaron en Erez durante la reunión, podía leerse "Bibi (Netanyahu), ya es la hora".
Israel firmó el compromiso de replegarse del sector que ocupa en Hebrón, aproximadamente 85 por ciento de la ciudad, que era la octava de las ciudades incluidas en el plan de autogobierno de Cisjordania, junto a la franja de Gaza.
Los israelíes podrán mantener su ejército vigilando la seguridad del 15 por ciento de la ciudad en el que habitan los colonos judíos.
Alrededor de 450 colonos israelíes viven en cinco grandes edificios de apartamentos, cuatro de ellos relativamente próximos entre sí, en el centro de Hebrón, y uno a un kilómetro de distancia. El resto de la ciudad está habitado por 110.000 palestinos.
La ciudad es un tema de gran sensibilidad para ambas partes porque alberga la Tumba de los Patriarcas, conocida como Mezquita Ibrahimi por los musulmanes, que es reverenciada tanto por éstos como por los hebreos como un lugar sagrado.
El repliegue de las tropas israelíes fue repetidamente pospuesto por el gobierno laborista que dirigía Shimon Peres, debido a cuestiones de seguridad. Finalmente se acordó ejecutar el retiro en marzo pasado, pero la orden fue suspendida cuando se produjeron cuatro ataques suicidas que sacudieron a Israel.
Peres volvió a retrasar el programa en abril, y prometió que el repliegue sería efectuado después de las elecciones de mayo. Ese anuncio dejó la tarea a cargo del gobierno derechista de Netanyahu.
El actual primer ministro prometió durante la campaña electoral que Hebrón continuaría siendo una ciudad judía bajo soberanía israelí.
Enfrentado con la presión internacional y de los moderados que integran su propio gobierno, Netanyahu cambió esa retórica y comenzó a referirse a la "reciprocidad". Esta palabra implica el respeto mutuo a los acuerdos de Oslo.
"Enfatizamos en la necesidad de tomar en cuenta las necesidades de ambas partes, basados en la reciprocidad y en las garantías de bienestar, tanto para israelíes como para palestinos", dijo Netanyahu.
En las últimas semanas, varios ministros israelíes propusieron cambios al acuerdo existente, lo cual permitiría a los soldados israelíes continuar patrullando toda la ciudad de Hebrón después de un retiro simbólico que permitiría la entrada de la policía palestina en la ciudad.
El ministro de Salud de Israel, Tzahi Hanegbi, dijo que su país no consideraría el repliegue de la ciudad a menos que se registren cambios en los acuerdos de seguridad y los palestinos permitan el crecimiento de los asentamientos judíos en el centro de la ciudad.
El ministro de Infraestructura, Ariel Sharon, propuso además enmendar el acuerdo firmado, de modo que permita a civiles palestinos controlar más de 95 por ciento de la ciudad, mientras Israel retendría controles de seguridad en todo el territorio urbano.
Los palestinos rechazan cualquier propuesta de Israel respecto de Hebron que altere los acuerdos ya existentes y reclaman al gobierno de Netanyahu la implementación de los firmados durante la administración del Partido Laborista.
Esta posición supone un aparente cambio en la voluntad previamente manifestada por los palestinos, de negociar cambios en los acuerdos referidos a Hebrón. Analistas palestinos afirmaron que se intenta así evitar el mal precedente que constituirían las modificaciones a un pacto ya firmado.
El retiro de los soldados de Hebrón pondrá el último tercio de Cisjordania bajo autogobierno palestino. Hebrón y sus poblados circundantes constituyen la mayor de las provincias de Cisjordania, con unos 300.000 habitantes.
Los colonos judíos rechazan el repliegue israelí de la ciudad en cualquier circunstancia, incluso de acuerdo con los postulados de Sharon, considerado el más reticente de los ministros de Netanyahu a mantener buena relación con los palestinos.
Los dirigentes de los asentamientos anunciaron que rechazarán cualquier propuesta que inserte un "ejército terrorista" en Hebrón.
"Esta ciudad deberá permanecer unida como parte del Estado de Israel, y toda la seguridad debe quedar en manos del ejército", dijo Wilder.
Egipto reclamó esta semana a Israel el retiro de las tropas en tres semanas. (FIN/IPS/tra-en/dho/rj/arl-mj/ip/96