El candidato presidencial sandinista Daniel Ortega otorgó un amplio apoyo en Nicaragua a las reivindicaciones de género al prometer la implementación de las decisiones de la cuarta Conferencia Mundial sobre la Mujer, celebrada hace un año en Beijing.
El opositor Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN), de Ortega, se comprometió a crear un Ministerio de la Mujer y aplicar un programa contra la violencia doméstica en caso de triunfar en las elecciones del 20 de octubre.
También acordó con grupos femeninos independientes la elaboración de un plan para garantizar el cumplimiento de la Plataforma de Acción Mundial de la Mujer, aprobada en la conferencia internacional de Beijing.
Esos compromisos, suscriptos ante la Coalición Nacional de Mujeres, que agrupa a organizaciones femeninas de todas las corrientes políticas, ideológicas y religiosas, podrían aportar un importante apoyo al FSLN entre las mujeres, que conforman más de la mitad del electorado nicaragüense.
Pero algunas representantes de la Coalición de Mujeres advirtieron a Ortega que no admitirán la manipulación electoral ni política de los pactos firmados.
"Deseamos que el Frente Sandinista no utilice políticamente para su conveniencia" los acuerdos suscriptos, sino que su compromiso estimule "a otras fuerzas políticas, con posibilidad de ser gobierno, a dar prioridad al tema de la mujer", dijo Rhina Cardenal, candidata a diputada por la coalición conservadora UNO 96.
Las encuestas de opinión anuncian que las mujeres decidirán con su voto el resultado de las elecciones, ya que son mayoría entre los indecisos.
Según investigaciones publicadas, las mujeres jugaron en 1990 un papel fundamental en la victoria de Violeta Chamorro, al apoyar las propuestas de esa candidata de acabar con la guerra civil y suprimir el servicio militar obligatorio, que llevaba al frente de batalla a los jóvenes entre 16 y 24 años.
Ahora, las prioridades en la agenda electoral femenina son el empleo, la estabilidad social y el acceso gratuito a la salud y la educación.
Así mismo, la violencia doméstica ocupa un lugar destacado entre las preocupaciones de las organizaciones femeninas, ya que se asegura que cuatro de cada diez mujeres han sufrido maltrato físico y sicológico de parte de su pareja.
Un informe del Instituto Nicaragüense de la Mujer indicó que en el primer semestre de este año se registraron oficialmente 1.774 agresiones contra las mujeres, de parte de sus cónyuges o novios.
Del total de agredidas, más de 300 resultaron con graves lesiones y cerca de 105 fueron violadas por su pareja.
"El problema es más grave, ya que estas cifras no corresponden ni a la tercera parte de los casos ocurridos en el país", afirmó Orfa López, funcionaria de las Comisarías de la Mujer, creadas para proteger y asesorar a las mujeres maltratadas.
El FSLN aparece a la vanguardia de los partidos políticos en cuanto a la cantidad de mujeres incorporadas a las listas electorales.
Los sandinistas presentan nueve aspirantes titulares y ocho suplentes a la Asamblea Nacional legislativa, y la gran mayoría de las primeras parecen tener el escaño asegurado.
En las listas de Alianza Liberal, el partido que disputará el triunfo al sandinismo, según las encuestas, figuran tres candidatas titulares y cuatro suplentes, todas en posición desventajosa.
"Tenemos bastantes mujeres, pero quedaron en posiciones secundarias", admitió Leda Sánchez de Parrales, candidata a vicealcaldesa por la Alianza Liberal.
"Creo que eso ocurrió igual en casi todos los partidos", agregó. Pero no fue así en el FSLN, que dispuso de modo intercalado a mujeres y hombres en sus listas de aspirantes a la Asamblea Nacional y al Parlamento Centroamericano. (FIN/IPS/rf/ff/ip pr/96
