El Senado de México aprobó hoy una ley que establece multas, controles y asesoramiento a empresas locales que se sometan o resulten afectadas por leyes extranjeras como la Helms-Burton de Estados Unidos, que endurece el bloqueo a Cuba.
Por unanimidad y en menos de 20 minutos, los senadores sancionaron la "Ley de Protección al Comercio y la Inversión" enviada a inicios de mes por el gobierno del presidente Ernesto Zedillo, luego de concertar previamente su contenido con autoridades, empresarios y diputados.
La nueva norma, que deberá ser sancionada los próximos días por el pleno del Congreso, se dictó para contrarestar "leyes arbitrarias como la Helms-Burton", se apunta en el dictamen de los senadores mexicanos.
La ley antídoto o espejo prohibe al gobierno y a las empresas locales entregar información a tribunales y autoridades extranjeros que pretendan aplicar sanciones por mantener vínculos con países objeto de algún tipo de bloqueo político o económico.
Además. prohibe el sometimiento a leyes de otros países y faculta a los tribunales federales locales a denegar reconocimiento y ejecución de sentencias, requerimientos judiciales o laudos de jueces extranjeros.
También sanciona con multas de hasta 600.000 dólares a quienes incumplan lo estipulado en la norma y, en caso de reincidencia, se duplicará la sanción.
Cualquier empresa mexicana que pierda un juicio en base a una ley como la Helms-Burton estará en posibilidad de resarcir sus daños en México con los activos de las firmas extranjeras que le causen el perjuicio.
Las autoridades mexicanas se comprometen a brindar todo el asesoramiento necesario a las empresas amenazadas por leyes extranjeras.
Desde que Washington sancionó en marzo la ley Hemls-Burton, que establece sanciones para quienes comercien e inviertan en Cuba, amplios sectores sociales y políticos de México, país que mantiene crecientes vínculos con la isla, elevaron sus voces de protesta por el carácter extraterritorial de la misma.
Pese a que la ley fue condenada en Europa y por la Organización de Estados Americanos, la embajadora de Estados Unidos en México, Harriet Babbit, ratificó la semana pasada que su gobierno la pondrá en práctica.
En agosto, el gobierno estadounidense envió una carta a la empresa mexicana Domos, que tiene inversiones en Cuba en el sector de telecomunicaciones, amenazándola con negar el ingreso de sus ejecutivos y familiares si no abandona el país caribeño.
La empresa, con el respaldo oficial, respondió que continuará en Cuba e incluso concretará nuevos proyectos.
Unas 200 empresas mexicanas, incluidas estatales, mantienen negocios en el país caribeño en sectores como petróleo, turismo, textiles y comunicaciones.
México, el único país de América Latina que no rompió relaciones con Cuba en la década del 60, mantiene un comercio global con la isla superior a 300 millones de dólares anuales. (FIN/IPS/dc/ag/ip/96