La Junta Ejecutiva del Fondo Monetario Internacional (FMI) allanó el camino para que la institución participe en una iniciativa destinada a aliviar la carga de la deuda que soportan los países más pobres.
"Se han alcanzado los acuerdos necesarios, en el seno de la Junta, para garantizar la permanencia del fondo ampliado de ajuste estructural (ESAF), que es la boca de salida de nuestros préstamos concesionales a los países de bajos ingresos", informó el director gerente del FMI, Michel Camdessus.
"También se ha autorizado la participación de la institución en la iniciativa conjunta, con el Banco Mundial, en favor de los países pobres altamente endeudados", añadió Camdessus en una declaración emitida el miércoles por la noche.
La suerte de esta iniciativa depende ahora del Club de París, formado por los gobiernos acreedores de deudas bilaterales, a los cuales es debida la mayor parte de la deuda del Tercer Mundo.
Los miembros del Club de París deberán determinar en su reunión del 23 de este mes, de qué manera, cuándo y en qué condiciones van a concretar su aporte a esta iniciativa de perdón de la deuda a los países más pobres.
El Banco Mundial contribuyó con 500 millones de dólares al proyecto, pero su contribución "depende de que sea aceptado el conjunto del plan de alivio de la deuda, por el FMI y el Club de París", informó a IPS un portavoz del Banco.
El FMI, por su parte, dijo que no espera tener ningún problema con el Club de París. "Ellos tienen un papel que desempeñar y han dicho que lo cuplirán", declaró un portavoz del Fondo.
El consentimiento de la Junta Ejecutiva autoriza al FMI a comprometer 700 millones de dólares en apoyo de la iniciativa, según informó a IPS el portavoz de la institución.
La resolución de la Junta autoriza la venta de una parte de las reservas de oro del FMI con ese propósito, pero sólo como último recurso. Antes que salir a vender oro, el Fondo deberá obtener todo el dinero que sea posible a través de donaciones de los Estados miembros y de cuentas para situaciones especiales.
Los grupos de presión que luchan por el alivio de la deuda expresaron, sin embargo, su preocupación por la forma en que el FMI se apoya en el ESAF, al que consideran una parte del problema del endeudamiento y no una parte de su solución.
"El FMI cree que puede reducir la deuda por medio de nuevos préstamos blandos", dijo Justin Forsyth, de Oxfam International.
El Fondo canalizará a través del ESAF sus compromisos en favor del alivio del endeudamiento. El sistema usual consiste en conceder préstamos a cinco o 10 años al interés de 0,5 por ciento anual, de forma que los países puedan continuar aplicando políticas de ajuste estructural y pagando su deuda.
Bajo esta iniciativa, los préstamos ESAF podrían otorgarse por plazos entre 10 y 20 años. (FIN/IPS/tra-en/aa/yjc/arl/if/96