El opositor Frente Farabundo Martí (FMLN) de El Salvador le ganó la partida al gobierno conservador de Armando Calderón Sol, al obligarlo a renunciar a la creación de un cuestionado sistema de seguridad pública con participación ciudadana.
El dirigente del FMLN Gerson Martínez dijo a IPS que el gobierno tuvo que reconocer que el desarrollo de las llamadas Juntas de Vecinos para el combate de la delincuencia no prosperarían, ya que el concepto empleado resultaba peligroso y podría convertirlas en organismos paramilitares.
El gobernante partido Alianza Republicana Nacionalista (Arena) planteó en mayo del año pasado la idea de establecer Juntas de Vecinos en todos los municipios del país para que colaboraran con la Policía Nacional Civil en el combate de la delincuencia a nivel de comunidades.
Hasta el momento, se crearon 114 juntas, especialmente en las zonas occidental y oriental del país, donde la criminalidad crece en forma alarmante.
El FMLN cuestionó el mecanismo, arguyendo que no estaba en contra de la participación ciudadana en apoyo a la seguridad pública, pero tal como Arena planteaba a las juntas resultaba un mecanismo intermediario entre el gobierno y la ciudadanía.
En el pasado reciente de confrontación y guerra civil (1970- 1992) los gobiernos dictatoriales crearon mecanismos parecidos denominados Patrullas Cantonales u Organización Democrática Nacionalista (Orden), los cuales se constituyeron en verdaderos escuadrones de la muerte de ultraderecha.
Al abandonar el país el viernes tras una visita de 48 horas, el secretario adjunto de las Naciones Unidas (ONU), Alvaro de Soto, dijo que Calderón Sol le había asegurado que dicho proyecto no prosperaría.
"Como consecuencia lógica las ya instituidas (juntas) serán desarticuladas", apuntó el alto funcionario de la ONU, quien actuó como mediador entre el gobierno y el FMLN en el proceso negociador que puso fin a la guerra civil en enero de 1992.
En tanto, el ministro del Interior, Mario Acosta, criticó públicamente a la ONU, al manifestar que "está yendo más allá de su mandato", e insistió que los acuerdos de paz se consolidarán en la medida en que la ONU se retire de El Salvador como observador del proceso pacificador el 31 de diciembre próximo.
Acosta negó que el proyecto de Juntas de Vecinos puedan asociarse a Orden y aseguró que la confusión fue creada por el FMLN, que interpretó sus formaciones como un modelo de "comités de barros" que crearon los sandinistas en Nicaragua para mantener el espionaje político contra la población.
Por su parte, el diputado oficialista Renato Pérez justificó las Juntas de Vecinos y defendió el pasado de Orden al expresar que de no haber sido por dicha institución "en el país se hubiera extendido el comunismo".
A Orden, creada a fines de la década del 60, se le achacan miles de asesinatos, masacres, desapariciones y torturas en contra de civiles, especialmente de las áreas rurales.
Las Juntas de Vecinos han sido impulsadas por el Ministerio de Seguridad Pública y, según voceros del FMLN, sus dirigentes son escogidos entre los miembros de Arena, cuyo oregen está vinculado a la violencia política.
Al fundador de Arena, el fallecido Roberto D'Aubuisson, fue un oficial de inteligencia al que se le involucró en la creación de escuadrones de la muerte y se lo señalo como autor intelectual del asesinato del Arzobispo Oscar Romero, el 24 de marzo de 1980.
Martínez consideró que la ciudadanía debe participar en el combate a la delincuencia a través de su propia organización y no con mecanismos impuestos por el gobierno.
Por otra parte, el dirigente del FMLN agregó que para ser efectivo el combate contra la criminalidad, en la Policía Nacional Civil deben desarrollarse mecanismos de control y disciplina y que funcione autónomamente la Inspectoría policial. (FIN/IPS/jd/ag/ip/96
