Los países que respaldan el tratado de prohibición de las explosiones nucleares de prueba contarán el próximo lunes con el apoyo de una amplia mayoría en la Organización de las Naciones Unidas (ONU).
Ese apoyo, según los impulsores del tratado, abrirá el camino para que los estados firmen el Tratado de Prohibición Completa de Pruebas Nucleares (CTBT, según sus siglas en inglés) durante el mes próximo en la sede de la ONU, y conducirá a una moratoria de los experimentos atómicos.
México y Colombia son los únicos países de América Latina que no apoyan el CTBT, al igual que muchos asiáticos, mientras toda Europa oriental y occidental se manifiesta a su favor, indican analistas.
"Es muy posible que nunca más haya una prueba nuclear" tras la aprobación del tratado por la Asamblea General de la ONU, de 185 miembros, dijo el embajador estadounidense, durante mucho tiempo dedicado a la negociación por el desarme.
Leonard estima que unos 110 países están dispuestos a firmar y ratificar el tratado, que prohíbe todas las explosiones nucleares, sean en el espacio, el subsuelo, la tierra o el mar.
Otros expertos son igualmente optimistas sobre las posibilidades del CTBT. "Estamos en vísperas de una enorme victoria", predijo Daryl Kimball, director de programas de seguridad de Médicos por la Responsabilidad Social, un grupo antinuclear.
El emajador de Australia, Richard Butler, quien lidera la acción por la aprobación del acuerdo, dijo que este podría lograr la adhesión de 100 países.
Al menos 70 países han acordado no sólo aprobar la resolución, sino además bloquear cualquier enmienda y lograr el apoyo de otras naciones.
Dos semanas atrás India bloqueó el consenso sobre el CTBT en la Conferencia sobre Desarme realizada en Ginebra, y pese a dos años de negociaciones, las dudas sobre el acuerdo hicieron a muchos países cuestionar sus méritos.
El embajador de India ante la ONU, Prakash Shah, sostiene que el tratado únicamente preservará el statu quo, ya que permitirá a las cinco potencias nucleares (China, Estados Unidos, Francia, Gran Bretaña, Rusia) continuar con las pruebas computarizadas, evitando que otros países avancen en esfuerzos similares.
India, junto a Pakistán e Israel, debe, bajo los términos del CTBT, ratificar el pacto tres años antes de que este entre en vigor.
Fuerzas en las potencias nucleares, por ejemplo el Partido Republicano en Estados Unidos y autoridades de los ministerios de Defensa de Gran Bretaña y Rusia, se oponen al tratado porque detendría sus intentos por mejorar las armas atómicas, señaló Plesch.
Lo que ha llevado el CTBT al punto en que se encuentra no son los intereses de los gobiernos de las potencias nucleares, sostuvo el experto, sino el respaldo masivo en todo el mundo al desarme.
La Coalición por la Reducción de los Peligros Nucleares, centro de investigación con sede en Washington, señala que más de 70 por ciento del público estadounidense se pronunció a favor de la prohibición de las pruebas nucleares en una serie de encuestas realizadas en los últimos 30 años.
En el sondeo más reciente, efectuado en 1994, 80 por ciento de los entrevistados dijeron que el presidente Bill Clinton debe "presionar por la prohibición de las pruebas nucleares". (FIN/IPS/tra-en/fah/yjc/lp/ip/96