Los candidatos más nacionalistas de las tres etnias enfrentadas en la guerra civil que sufrió Bosnia- Herzegovina durante 43 meses lograron un triunfo aplastante sobre sus rivales en las elecciones de este sábado, se anunció hoy.
Quienes, según el último escrutinio parcial, ocuparán los tres asientos de la presidencia colectiva de Bosnia-Herzegovina (el musulmán Alija Izetbegovic, el serbio Momcilo Krajisnik y el croata Kresimir Zubak) se han manifestado, en mayor o menor grado, en favor de la partición del país.
Los resultados parciales del escrutinio de cerca de un millón de votos, que corresponden a casi la mitad de los circuitos electorales del país, fueron difundidos este martes por la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa (OSCE), alianza que organizó los comicios.
La presidencia de Bosnia-Herzegovina se integrará, de acuerdo con el acuerdo de paz firmado en Dayton en 1995, con un integrante croata, otro musulmán y un tercero serbio. La intención del pacto fue tender a la creación de un cuerpo multiétnico capaz de mantener la unidad del país.
El candidato que haya cosechado mayor cantidad de sufragios individualmente presidirá el órgano ejecutivo, y seguramente será Krajisnik, quien postula la unión del territorio serbio en Bosnia- Herzegovina a la República Serbia.
Bosnia-Herzegovina está, efectivamente, dividida en dos. Por un lado, existe una Federación Croato-Musulmana que comprende 51 por ciento de su territorio, y, por otro, una entidad política serbia sin reconocimiento internacional, denominada Republika Srpska, en el resto.
Cada región votó en forma separada por sus candidatos. Izetbegovic, quien ocupa actualmente la presidencia de Bosnia- Herzegovina, obtuvo 82,24 por ciento de los alrededor de 492.000 votos emitidos por los musulmanes en el escrutinio parcial.
Por su parte, Krajisnik conquistó 78,8 por ciento de los votos serbios ya contados, mientras el tercer asiento de la presidencia colectiva corresponderá, seguramente, a Zubak, quien concitó 88,3 por ciento de los sufragios croatas escrutados hasta este martes.
Krajisnik, de 52 años, es economista y uno de los dirigentes más poderosos de la Republika Srpska, estrechamente vinculado con Radovan Karadzic, el ex presidente de la entidad serbia acusado de crímenes de guerra y genocidio en un tribunal de Naciones Unidas.
El político serbio fue portavoz de la asamblea legislativa de la republica de Bosnia-Herzegovina cuando este país integraba la antigua Yugoslavia, pero renunció al comienzo de la guerra, en abril de 1992, para asumir la presidencia del parlamento creado por los serbios en territorio bosnio.
Krajisnik estuvo involucrado en la planificación y ejecución del conflicto. Muchos activistas de defensa de los derechos humanos le consideran afortunado pues no fue acusado de crímenes de guerra junto con Karadzic.
Nacido en el pequeño poblado de Zabrdje, al oeste de Sarajevo, este hombre pequeño, rechoncho y de cejas irsutas fue director financiero de la compañía energética Energopetrol.
Amigo íntimo de Izetbegovic antes de la guerra, se convirtió al nacionalismo serbio después de que conoció a Karadzic en la década del 80, obtuvo un escaño en el parlamento bosnio en 1990 y fue electo portavoz del órgano.
Krajisnik se opuso con dureza a la firma del acuerdo de Dayton en diciembre de 1995, especialmente en lo que refiere al reconocimiento del derecho de los refugiados musulmanes y croatas a regresar a los poblados de donde proceden.
Durante la campaña electoral, se manifestó partidario de la creación de un estado serbio separado en Bosnia-Herzegovina, pero bajó los decibeles de sus discursos tras las severas objeciones que le formuló la OSCE.
Krajisnik pasó los años 1986 y 1987 en la cárcel, denunciado de emplear fondos de Energopetrol en la construcción de una residencia de descanso para él y Karadzic. La acusación no fue presentada formalmente y ambos fueron dejados en libertad bajo fianza.
Izetbegovic, de 71 años, es el líder del Partido de Acción Democrática (SDA), de orientación nacionalista musulmana, y el más destacado político de Bosnia-Herzegovina.
Se trata de un musulmán devoto que es el único de los seis actuales líderes de los países que integraban la antigua Yugoslavia que se mantuvo al margen del entonces gobernante Partido Comunista.
Abogado nacido en Bosanski Samac, pasó la mayor parte de su vida en Sarajevo. Fue encarcelado durante nueve años en la antigua Yugoslavia. En 1945, además, vivió tres años entre rejas por integrar el movimiento clandestino Jóvenes Musulmanes.
En 1983, fue sentenciado a seis años de prisión por la publicación de "La declaración islámica", un documento en el que analizaba el papel del Islam en la sociedad, cuestionado por "fundamentalismo".
Al ser liberado en 1989, fue cofundador del SDA, definido como "alianza política de ciudadanos yugoslavos pertenecientes a las tradiciones culturales e históricas musulmanas". Sus partidarios lo bautizaron "padre de la patria" y lo describen como persona austera y reservada.
En las primeras elecciones multipartidarias celebradas en Bosnia-Herzegovina, en 1990, fue el segundo candidato más votado, después del empresario musulmán Fikret Abdic, quien dio un paso al costado en su favor en señal de "respeto a su autoridad y veteranía".
En 1991, declaró que elegir entre el presidente de Serbia, Slobodan Milosevic, y el de Croacia, Franjo Tudjman, era "como elegir entre una leucemia y un cáncer de cerebro".
Izetbegovic obtuvo la independencia de Bosnia-Herzegovina en abril de 1992, episodio que precipitó la guerra de 43 meses contra separatistas serbios y croatas que temían el predominio musulmán.
"Es bueno tener un estado multicultural, pero primero debemos proteger los intereses de los (musulmanes) bosnios", declaró durante la campaña electoral, en respuesta a la oposición antinacionalista.
Zubak, de 49 años, es abogado y ocupó cargos de juez. Croata originario del poblado septentrional de Doboj, actualmente bajo control serbio, integra el nacionalista Partido Democrático Croata (HDZ), dentro del cual es considerado un moderado.
El dirigente conquistó el poder en el autodeclarado estado de Herzeg-Bosna, creado por separatistas croatas, supuestamente desmantelado bajo los términos del acuerdo de Dayton para allanar el camino a la constitución de la Federación Croato-Musulmana. Zubak fue el primer presidente de la federación.
Su primera actividad política ocurrió hace 10 años, cuando se afilió al entonces poderoso Partido Comunista de Yugoslavia, pero le faltó capacidad política para ser más que un asesor del Ministerio de Justicia de Bosnia-Herzegovina.
Cuando estalló la guerra de 1992, Zubak se unió a las fuerzas croatas en Bosnia como oficial de la brigada 110 y resultó herido en una batalla contra los serbios. Es considerado leal a Tudjman, el presidente de Croacia, con quien se reúne con frecuencia.
Zubak afirmó tanto Croacia como Bosnia son sus patrias y defendió con ahínco el estado de Herzag-Bosna, pues, dijo, los croatas "temen ser tragados por la mayoría étnica musulmana en la Federación Croato-Musulmana".
En declaraciones a la televisión tres días antes de las elecciones, admitió que los tres integrantes de la presidencia colegiada atenderán los intereses de sus respectivos grupos nacionales más que los de Bosnia-Herzegovina como un todo. (FIN/IPS/tra-en/vpz/mj/ip/96