Su figura es esbelta, algunos dicen que es apuesto, pero la mayoría no han visto nunca su rostro.
Lagbaja, el músico enmascarado, es el nuevo furor de Nigeria.
En lengua yoruba, una de las más habladas en Nigeria, Lagbaja significa "persona sin nombre". Suele ser un término usado en sentido peyorativo para señalar a una persona que no es merecedora de reconocimiento social.
Durante sus apariciones públicas, Lagbaja usa una prenda muy colorida y pantalones hechos con una tela de algodón fabricada a mano, llamada "aso-oke". También utiliza la misma tela para cubrir su rostro, dejando agujeros para sus ojos, nariz y boca.
"La máscara es un símbolo del hombre común sin rostro de nuestra sociedad… él deambula y nadie repara en él", dijo Lagbaja a IPS en una poco frecuente entrevista concedida después de una recepción pública en Lagos.
Lagbaja rehusó entrar en cualquier diálogo que pudiera confirmar las afirmaciones de los medios en el sentido de que su verdadero nombre es Bisade Ologunde y que es un graduado de la Universidad de Obafemi Awolowo, sita en Ile-Ife, al nordeste de Lagos.
"Admito que la gente suele sentirse intrigada ante el hecho de que un músico se presente enmascarado, y por lo tanto quiere saber quién está detrás de esa máscara", reconoció entre risas ahogadas.
No obstante, insistió en que no debe ser tomado en serio. Prefiere que la gente se centre en sus comentarios sociales. Su último trabajo -La Mujer a la que le Propusimos Matrimonio- es la segunda recopilación realizada desde que debutó hace cuatro años.
Las 10 canciones del álbum son comentarios sobre la vida social en Nigeria y la vida de los africanos en la diáspora.
Con un apoyo muy fuerte en proverbios que toma prestados de su lengua nativa, el yoruba, el músico sostiene que "la peor enfermedad que puede sufrir una sociedad es un mal liderazgo. Cuando tienes malos dirigentes tienes un enorme problema, entonces te asaltarán los problemas menores".
Respaldado por el piano y por instrumentos de percusión, Lagbaja culpa a los malos conductores de los mayores problemas africanos, tales como "pobreza, depresión económica, corrupción, falta de organización, analfabetismo y militarismo".
No obstante, no todo en él es charla y filosofía. Por lo menos ocho de las piezas incluidas en su último álbum son una delicia para un bailarín, como lo es la que expresa, en yoruba, que "la mujer a la que le propusimos matrimonio se burla de nosotros y prefiere casarse con un abogado".
Lo mismo que Fela Anikulapo Kuti, el más reconocido en el campo internacional entre los músicos afrobeat de Nigeria, esta Persona sin Nombre siempre va armado de su saxofón, el cual toca para deleite de los jóvenes y de los mayores, de los ricos y de los pobres.
Al contrario que Fela, hace uso de los tambores indígenas nigerianos y toma prestado de géneros musicales de otras partes de Africa, tales como Ghana. El género kwasa-kwasa (rumba de Zaire), el muy popular en países del Africa subsahariana.
Usa una mezcla de música juju y de trompetas, y pasa con suavidad pero rápidamente de una mezcla a otra, lo cual puede confundir a algunos bailarines, pero encanta a los buenos.
Ayopo Apesin, un crítico de espectáculos, dice de Lagbaja: "El enmascarado ha hecho la diferencia entre ser educado y no serlo". Afirma conocer al músico, y que éste posee un título de maestría en administración de empresas.
Entretanto, la máscara de Lagbaja sigue en su lugar.
Mientras el hombre común no tenga un rostro, Lagbaja no tendrá un rostro", aseguró a IPS. (FIN/IPS/tra-en/ro/kb/arl/cr/96
