La caída de audiencia que han sufrido en los últimos años en Ecuador las telenovelas importadas ha llevado a los estrategas del mercado a impulsar una nueva forma de retener al espectador frente a la pantalla chica.
Automóviles, electrodomésticos, viajes a Cancún y a Hawai o camisetas con el logo del canal son algunos de los premios que aquí se pueden ganar "con sólo identificar qué vestimenta porta la mascotita de la televisora" que aparecerá en las pantallas a lo largo de la serie.
Pero si la mascota no es de su agrado, el teleespectador puede ver otra telenovela donde, para conseguir el premio, tendrá que contestar preguntas sobre la trama como "¿a quién ama en realidad Carlos Alfonso?".
"La recesión económica hace que la pelea por la audiencia se establezca en nuevos escenarios", comentó a IPS el periodista Gonzalo Ortiz.
Gamavisión, canal dos en Quito, inició la estrategia del concurso y la telenovela hace seis meses y ahora tres de los cinco canales de frecuencia nacional, los más importantes, utilizan el sistema que les ha redituado en puntos de audiencia, según los datos de la encuestadora Nilsen.
Las telenovelas de Gamavisión son en su totalidad mexicanas, ya que esta empresa mantiene un convenio con Televisa de ese país, y su horario estelar de las 20:30 horas tiene el primer lugar de sintonía a nivel nacional con la serie "Marisol".
Sin embargo, antes de lanzar al mercado su estrategia de concurso, que consiste en completar una frase con las palabras que asoman en la pantalla a lo largo de la serie, ese canal se encontraba entre los menos
Para Iván González, ex ejecutivo de ventas de Televisa, "esta estrategia de mercado recoge dos experiencias de gran aceptación para el público latinoamericano".
Por un lado, las telenovelas, "que siguen vigentes desde su aparición, y por otro los concursos, que tienen una historia paralela y han resurgido en muchos países", comentó a IPS.
"La telenovela llegó a su máximo", dijo a su vez Manolo Sarmiento, conductor de un popular programa de televisión que se ha mantenido durante seis años en el aire dentro de los primeros lugares de sintonía.
Desde los tiempos de "El derecho de nacer", radionovela que impuso el fenómeno latinoamericano de los melodramas hace más de 50 años, y que luego fue llevada a la televisión, "se explotó el género hasta el punto de convertirlo en comedia, como también se les denomina a estas teleseries", apuntó.
Una comedia, "bajo una estricta definición, es aquella obra o pieza que plantea situaciones llenas de peripecias y enredos", senaló Sarmiento, para quien "los dramas latinoamericanos llegan a ser tan trágicos que provocan la risa de la gente, sin ser este su objetivo".
Pero "la gente ya no siente reflejada su realidad en la pantalla, condición que ha marcado el éxito de los grandes clásicos de la televisión", y los canales locales muestran poca apertura a la producción nacional, "que consideran como una inversión de alto riesgo".
Es necesario un mayor impulso a las producciones nacionales, "eso lo saben las televisoras y lo demuestran los programas de reportajes locales, que ocupan los primeros lugares de sintonía", estimó Sarmiento.
Ecuavisa, otra de las televisoras de alcance nacional, es la empresa que más ha apoyado a los realizadores ecuatorianos. A lo largo de 20 años produjo un total de 25 series, que despertaron el interés del público.
Hernán Cuéllar, presidente de la Asociación de Cineastas del Ecuador (Asocine), señaló al diario El Comercio de Quito, que la apertura de Ecuavisa a los productores nacionales debe ser imitada por otras enpresas del sector.
Sin embargo, los directivos de los canales de televisión argumentan que los costos de las producciones nacionales son muy elevados y que les resulta un mejor negocio transmitir series importadas.
"Los directores nacionales presentan proyectos que implican mucho tiempo y dinero, mientras los canales buscan producciones rápidas y poco costosas", señaló a El Comercio Leonardo Ponce, vicepresidente de Ecuavisa.
"Estamos ante la muerte natural de la telenovela clásica. Tal vez ahora tengamos que conformarnos con los concursos, si no existe apoyo a nuestra producción", concluyó a su vez Sarmiento. (FIN/IPS/mg/dg/cr/96)