Un producto químico que puede afectar la fertilidad, la reproducción y el desarrollo humanos se vende en todo el mundo como pesticida o para combatir piojos y sarna, según médicos y activistas que pretenden prohibir la sustancia.
Las conclusiones de estudios sobre el efecto del "lindane" sobre la reproducción humana no son terminantes aún, pero su uso en animales provoca graves modificaciones hormonales, alertaron científicos estadounidenses.
Ratas, ratones y conejos tratados con lindane sufrieron degeneración de tejido testicular, abortos, reducción del ritmo ovulatorio y de los espermatozoides en el semen.
Además, al ser liberada al ambiente a través de los sistemas cloacales después de su uso, ingresa en la cadena alimenticia humana, pues se concentra en los tejidos de animales marinos, según varias investigaciones.
La Coalición de Prevención del Cáncer (CPC), un grupo civil que reclamó a la Administración de Drogas y Alimentos de Estados Unidos (FDA) la prohibición del medicamento, afirmó que también la incidencia de cáncer aumenta entre los niños tratados con lindane.
El uso de esta sustancia en dosis mayores a las recomendadas ha provocado convulsiones, ataques epilépticos, estados de coma, retardo mental permanente e incluso la muerte, sostuvo la CPC.
"Es un medicamento bastante malo, pero lo estamos aplicando en la cabeza de nuestros niños", dijo María Valenti, directora ejecutiva de la asociación Médicos de Boston por la Responsabilidad Social (GBPSR).
La Organización Mundial de la Salud reclamó la prohibición del lindane, en uso desde fines de la década del 40, y recomienda el uso de pesticidas derivados de ciertas plantas como alternativa.
Valenti, quien recuerda haber utilizado el lindane para curar a sus propios hijos hace 20 años, fue una de las redactoras del informe "Generaciones en riesgo", que reseña los efectos de diversas sustancias en la salud reproductiva.
El lindane, un derivado del DDT, de uso común para el combate de plagas agrícolas, es una de los tóxicos que integran la lista denominada "docena sucia" por la Red de Acción contra los Pesticidas (PAN) en California.
El uso inadecuado de lindane es común entre granjeros de países en desarrollo que carecen de información sobre los efectos de la sustancia.
Según distintas investigaciones, el cuerpo absorve el medicamento a través de la piel y no lo desecha con facilidad. Como otros derivados del DDT, tiende a acumularse en los ecosistemas donde actúa.
El lindane y otras sustancias se acumulan en grasa y nervios, y puede hacerlo en altas cantidades si la exposición es continua. Además, se incorpora a la cadena alimentaria al ser liberado al ambiente.
Un examen efectuado en el mar del Norte reveló que la concentración de lindane en los nervios de animales marinos es un millón de veces mayor que la del ambiente acuático, de acuerdo con el PAN.
Este medicamento, que también puede ser absorbido por humanos a través de la piel y de los sistemas respiratorio y digestivo, está prohibido en 28 países y severamente restringido en otros 18, pero es muy usado con fines agropecuarios en muchos países en desarrollo.
El lindane no está prohibido para su uso humano en Estados Unidos, si bien se restringió su aplicación como pesticida a algunas variedades de árboles.
La doctora Gina Solomon, coautora del informe del GBPSR, dijo que, si bien se conocen los efectos a corto plazo de la exposición al lindane, los efectos crónicos y a largo plazo sobre los sistemas reproductivos son difíciles de determinar.
Pero Solomon, científica del Consejo de Defensa de los Recursos Naturales, dijo que no se arriesgaría a recomendarlo, pues no existe evidencia concreta sobre su inocuidad en los sistemas hormonales.
"A falta de esos conocimientos, no propondría el uso de lindane en niños, pues el desarrollo hormonal es un proceso delicado", concluyó.
El lindane destruye el sistema nervioso central de las pestes contra las cuales se lo recomienda. Pero, de acuerdo con el informe, provoca el mismo efecto en los pacientes humanos si se aplica en forma incorrecta.
"El fin de los pesticidas es ser tóxicos. De otro modo, no tendrían ningún valor. Pero al efecto intencional se suma el perjuicio sobre otros organismos, como insectos beneficiosos, lombrices, hongos de tierra, bacterias, peces, vida silvestre, animales domésticos y seres humanos", señala el informe.
La FDA efectuó un estudio a solicitud de médicos que señalaron el daño neurológico sobre los niños, pero concluyó que el lindane era "por lo general seguro y efectivo cuando se usa de acuerdo con las indicaciones aprobadas".
La impresión de advertencias en los envases del tóxico dispuesta por la FDA no es una precaución suficiente para organizaciones como Greenpeace y la CPC, que reclaman una prohibición total.
La FDA recibió por lo menos datos de 162 casos de reacciones adversas al lindane entre 1972 y 1994, según la CPC. Asociaciones de defensa al consumidor advirtieron que las cifras reales podrían ser diez veces más altas.
En un período de cinco meses y medio en 1994, la Asociación Nacional contra la Pediculosis (NPA) recibió más de 200 llamadas referidas a efectos negativos del lindane.
"Yo sé lo que el lindane puede provocar en la gente. He recibido llamadas de madres llorando", dijo Keith Ashdown, portavoz de la CPC.
Los organismos de los piojos se hacen resistentes a muchos tratamientos tras exposiciones reiteradas. Los padres, frustrados luego de varios intentos, aplican lindane en la cabeza de los niños que ya habían sido sometidos a demasiadas sustancias.
"Por más que la FDA tenga buenas intenciones, su recomendación coloca a los niños en una situación de mayor riesgo aún", dijo Deborah Altschuler, presidenta de la NPA.
Esta asociación afirmó que recibe un promedio de 50 quejas diarias relativas a la ineficacia de los tratamientos que no incluyen lindane.
"Los piojos han desarrollado un apetito por determinados medicamentos a los que consideran su almuerzo", dijo un médico entrevistado para la última edición del boletín de la NPA.
Las farmacias minoristas de Estados Unidos recibieron en 1992 2,3 millones de prescripciones médicas de lindane como sustancia contra los piojos. Esa cifra disminuyó pues los medicamentos denominados con el nombre del tóxico fueron retirados del mercado.
Sin embargo, el lindane aún es ampliamente distribuido en todo el país en forma de shampú o loción, entre otras razones, porque es más barato que el resto de los tratamientos. Además, muchos consumidores creen que es más efectivo debido a que sólo se vende por prescripción médica.
"No es mejor. Solo es más tóxico", explicó Terri Meinking, profesora de dermatología de la Universidad de Miami, quien nunca recomendaría su uso.
Las epidemias de piojos son comunes en muchos países. Si no se las trata, la plaga puede provocar brotes de enfermedades mortales, como el tifus.
"El control de insectos es una cuestión de vida o muerte en algunos países. Es difícil decir 'no usen DDT y dejen que la gente muera de malaria", dijo Solomon. (FIN/IPS/tra-en/ma/yjc/mj/he en/96