Los mineros del carbón de Rusia irán a la huelga general el 25 de este mes en caso de que no se paguen salarios adeudados desde enero, anunció el presidente del sindicato del sector, Vitaly Budko.
El gobierno comenzó a liquidar haberes atrasados en las minas del oriental Territorio Marítimo y de la sudocciental Donbass, pero la cantidad desembolsada es todavía insuficiente.
Budko advirtió que un millón y medio de mineros suspenderán la actividad por tiempo indeterminado si no son satisfechas la totalidad de sus demandas. El carbón es la principal materia prima energética de la industria rusa.
Todas las minas se declararon en conflicto el miércoles y el comité central del llamado Sindicato Independiente de Mineros presentó al gobierno una lista de demandas. La primera exigencia consiste en el pago de salarios por 3.500 millones de dólares.
Los mineros exigen la identificación y sanción de los responsables por el atraso de pagos y la declaración del estado de emergencia económica en todo el país. Budko dijo que también se reclama la anulación del recorte de 50 por ciento operado el mes último en el presupuesto reservado al sector minero.
El sindicato solicitó esta semana al presidente Boris Yeltsin que tome personalmente el control de la industria del carbón, "que ha sido y aún es la base de la economía de Rusia".
Funcionarios del gobierno confían en superar la situación mediante el pago en todo o en parte de los salarios adeudados y y otorgando garantías de que los pagos se cumplirán puntualmente en el futuro.
Las huelgas en curso afectan nueve regiones de la Federación Rusa y tienen participación de 75.000 trabajadores. Unos 50 obreros ocupan desde el domingo las instalaciones de una mina en Tula y la actividad está paralizada en 19 de las 23 explotaciones de la empresa Rostovugol, en el oriente de Donbass, que tiene a 60.000 empleados en nómina.
Unos 6.000 mineros de Donbass y sus familiares realizaron el miércoles una concentración en la localidad de Sholojov Raion, para protestar por la retención de salarios.
La producción de carbón de Donbass equivale a 60 por ciento del total extraído en la antigua Unión Soviética.
La mina Borodinsky, la mayor del país, situada en la región de Krasnoyarsk, sólo entrega carbón contra pago al contado.
Así mismo, los obreros de cuatro minas de carbón fueron a la huelga en la localidad de Belovo, de la región de Kemerovo, y la mina Kapitalnaya, de la ciudad de Inta, ubicada en la república autónoma de Komi, está paralizada desde hace más de seis semanas.
La protesta se extendió a empresas dependientes de los suministros de carbón, y los trabajadores del transporte de la localidad ártica de Vorkuta paralizaron las operaciones de todas las minas del lugar al declararse en huelga.
La raíz del problema consiste en la falta de pago de los suministros de carbón. Sus clientes adeudan 1.300 millones de dólares a la industria del carbón.
La central energética número dos de Krasnoyarsk debe 220 millones de dólares por compras de carbón.
Sergei Yelashkin, integrante del comité de huelga de Krasnoyarsk, afirmó que la central paga sus atrasos a la comoañía energética local Krasnoyarskenergo y a la empresa nacional de distribución de electricidad, la Red Integrada de Energía, pero nada queda para los mineros.
Los problemas más graves se manifiestan en el Territorio Marítimo, situado en el extremo oriental de Rusia. Más de 12.000 mineros se encuentran el huelga allí desde el 15 de julio, paralizando la región.
Los huelguistas del Territorio Marítimo lograron la satisfacción de algunas demandas. El gobierno se propone investigar a 3.000 intermediarios que participan de la venta de electricidad en la región y perdonará todas las deudas ante el Estado por los trabajadores de las minas y del sector energético.
Moscú deberá desembolsar 8.500 millones de dólares para asistir a los sectores de combustibles y energía del Territorio Martítimo, pero exgirá algunos cambios como contrapartida, advirtió el ministro del sector, Yuri Shafranik.
Entre las medidas previstas se cuenta el aumento del precio de la electricidad a un dólar por kilovatio hora y la remoción de internmediarios en la cadena entre los productores y los consumidores de carbón.
El viceprimer ministro Vladimir Kadannikov aseguró que el gobierno federal saldará todas sus deudas con el Territorio Marítimo. Unos 90,5 millones de dólares fueron asignados al pago de salarios atrasados a los mineros del carbón y a los trabajadores del sector energético.
Una suma adicional de 150 millones de dólares está en camino a la región, informó Kadannikov.
Algunos trabajadores regresaron al trabajo en las minas de Primorskugol, en el Territorio Marítimo, aunque sin renunciar a la posibilidad de unirse a la huelga general anunciada para el 25 de este mes.
Así mismo, trabajadores portuarios, controladores aéreos, pescadores y mineros de las explotaciones de oro de los territorios del extremo oriente se pronunciaron en apoyo de una eventual huelga de solidaridad.
Los mineros de Primorskugol recibieron mensajes de solidaridad de la mayoría de los sindicatos de Rusia e incluso de trabajadores de América Latina y Sudáfrica, informó Pyotr Kiryasov, presidente del comité sindical local. (FIN/IPS/tra-en/jmp/rj/ff/lb/96